Luka Modric, el croata más grande de todos los tiempos, se despidió de los Mundiales con un triunfo sobre Marruecos 2-1 y un meritorio tercer lugar en Qatar 2022.

Croacia se adelantó pronto en el partido, con un gran remate con la cabeza de Josko Gvardiol, tras una jugada preparada dentro del área en el minuto 7, pero Marruecos respondió de inmediato, en el 9, con un gol de Achraf Dari, quien aprovechó un mal despeje de Lovro Majer. 

Sin embargo, Mislav Orsic, con un golazo en el minuto 42, le devolvió la ventaja a Croacia frente a Marruecos 2-1 antes del descanso.

La segunda parte siguió con buen ritmo e intensidad de ambas selecciones, pero Croacia tenía el control del balón, mientras Marruecos buscaba explotar la velocidad en ataque, sin mucha suerte.

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También hubo polémica, cuando no se marcó una falta sobre Gvardiol en el área y que tampoco se revisó en el VAR, cuando la televisión mostró claramente que sí hubo contacto que ameritaba un penalti.

Pero el marcador no cambió, Croacia ganó 2-1 y se confirmó como potencia mundial con otro tercer lugar, mientras Marruecos dejó huella como la sorpresa más agradable de los últimos tiempos, con una nobleza que le puede dar mayores satisfacciones en el futuro.