AP.- El veterano mariscal de campo Aaron Rodgers insistió en que no jugó papel alguno en el despido de Robert Saleh como entrenador de los New York Jets y calificó tales acusaciones como "patentemente falsas" y "ridículas".
Rodgers hizo su aparición semanal en The Pat McAfee Show el miércoles, un día después de que el propietario de los Jets, Woody Johnson, despidiera a Saleh tras el récord de 2-3 en el inicio de la cuarta temporada del entrenador.
Hubo especulaciones por parte de algunos medios y fanáticos de que Rodgers podría haber tenido algo que ver e influenciar a Johnson, quien dijo durante una conferencia telefónica el martes que la decisión fue "mi decisión y sólo mi decisión".
Te podría interesar
Johnson designó al coordinador defensivo Jeff Ulbrich como entrenador en jefe interino de los Jets por el resto de la temporada.
RIDÍCULAS
"En cuanto a cualquiera de las acusaciones ridículas que hay por ahí, no voy a dedicar más de una oración a responderlas", dijo Rodgers. "Y es que me molestan todas esas acusaciones porque son evidentemente falsas. Y es interesante la cantidad de poder que la gente cree que tengo, que no es así".
Rodgers confirmó que habló con Johnson el lunes por la noche durante una "amable llamada", pero dijo que el dueño simplemente le preguntó cómo se sentía después de torcerse el tobillo izquierdo en la derrota de los Jets ante Minnesota en Londres el domingo. Tanto Johnson como Rodgers dijeron que no se habló del futuro de Saleh.
"Woody no tiene obligación de dejarme saber cuáles son sus planes", dijo Rodgers. "Simplemente agradecí la llamada para saber cómo estaba".
AMISTAD
Rodgers habló sobre cómo la decisión de despedir a Saleh fue un recordatorio de que el futbol americano “es un negocio difícil" y que hay un aspecto humano en decisiones como esta.
Citó a la familia de Saleh, incluido uno de los siete hijos del entrenador con quien se hizo amigo durante las prácticas del equipo. Rodgers también reiteró que él y Saleh, quien dijo en una declaración que estaba "agradecido" por la oportunidad de ser el entrenador en jefe de los Jets, no estaban en desacuerdo.
El ala cerrada Tyler Conklin dijo durante una videollamada con los periodistas que pensaba que Rodgers "probablemente se lo tomó más duro que a casi nadie" porque estaba claro que "le pesó mucho".
"Amo al entrenador Saleh", dijo Rodgers. "Tenemos una relación muy sólida... Fue una de las razones principales por las que llegué a los Jets".
Rodgers también habló de ser responsable, empezando por él mismo.
"Tengo que jugar mejor, lo haré", insistió Rodgers. "Tenemos mucho por lo que jugar".
Los Jets juegan contra los Buffalo Bills el lunes por la noche en casa y una victoria les daría una parte del primer lugar en la AFC Este.