Miles de seguidores del AC Milan protestaron frente a la sede del club mientras los rossoneri concluían una temporada en la que no lograron clasificarse para Europa y perdieron ante el Bologna en la Final de la Copa de Italia.
"(El inversionista Paul) Singer, (el dueño Gerry) Cardinale, (el presidente Giorgio) Furlani, (el asesor Zlatan Ibrahimovic) Ibra, (el director del área técnica, Geoffrey) Moncada: todos fuera, liberen al Milan de esta agonía", decía una pancarta sostenida por los aficionados. Nombraron a los principales miembros de la gestión y propietarios del equipo.
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Más tarde, dentro de San Siro, durante el último partido de la Serie A del Milan contra el Monza, que ocupaba el último lugar, hubo más protestas. Los aficionados ultras en el nivel superior de un extremo se posicionaron para formar las palabras: "Váyanse a casa".
El Milan comenzó la temporada como un posible contendiente al título, pero terminó en noveno lugar, 22 puntos detrás del campeón Napoli. El siete veces campeón de Europa fue eliminado por el Feyenoord en los playoffs de la Champions League en febrero.
Mientras tanto, su rival de ciudad, el Inter de Milán, jugará contra el Paris Saint-Germain en la Final de la Champions el próximo sábado.