La coronación del Real Madrid como Campeón de LaLiga llegó con cuatro jornadas de anticipación, gracias a la humillante derrota del Barcelona 2-4 en su visita al Girona, que además aseguró una histórica clasificación a la Champions League la próxima temporada.
Tras el triunfo 2-0 del Real Madrid ante Cádiz, la necesidad del Barcelona se convirtió en obligación de ganar en su visita a Girona, pues cualquier otro resultado le devolvería el título de Campeón al Real Madrid. Y ocurrió de la manera menos pensada, al menos por los azulgranas.
Y aunque el Barcelona empezó bien al abrir el marcador con un gol de Christiensen en el minuto 3, el Girona le respondió de inmediato un minuto después con el 1-1 de Artem Dovbyk.
El panorama se aclaró antes del descanso, con un poco de polémica, aunque el penalti que convirtió Lewandowski en el minuto 46 lo avaló el VAR.
HAZAÑA
Pero la segunda parte recordó por qué el Barcelona no puede volver a los primeros planos. Sergi Roberto regaló un balón al intentar retrasarlo, el Girona lo robó y terminó con el empate 2-2 de Portu en el 65.
Y peor, un disparo de Miguel Gutiérrez dentro del área fue desviado por la defensa y el balón se fue al fondo, para el 3-2 del Girona que desataba los festejos por el título del Real Madrid.
La pesadilla del Barcelona no terminó ahí. Portu marcó un golazo en el 74 para hacer más humillante la derrota del Barcelona al entregarle el título de LaLiga al Real Madrid y, además, asegurar para el Girona un histórico pase a la Champions League en la próxima temporada, pues además de todo puede terminar como segundo, ya que con este triunfo supera por un punto a los culés.