Como flashazos repentinos que le llegan a la mente, ‘Luli’ va recordando la forma en la que fue violada por los jugadores de Vélez Sarsfield: José Florentín, Braian Cufré y Abiel Osorio, además de que Sebastián Sosa también se vio involucrado por ser quien contactó a la víctima y estuvo presente en la habitación donde se cometió el delito.
‘Luli’ es el apodo la periodista deportiva de 25 años. Aquella noche del pasado 2 de marzo fue invitada por Sosa a la habitación 407 del hotel Hilton de Tucumán, al poco rato llegaron los tres jugadores, todos se pusieron a charlar, pero sólo ella y el arquero bebieron de un termo, mientras que Florentín, Cufré y Osorio disimulaban que lo hacían, pero en realidad tomaban cerveza. Ella afirma que la bebida tenía algo, porque comenzó a sentirse muy mareada.
“Me abusaron sexualmente, tres con acceso carnal. Sosa estaba ahí, quien no me protegió, no me cuidó, considero que es el que me entrega. Mientras estaba siendo abusada por Florentín y Cufré, giré la cabeza para la cama donde estaba Sosa con Osorio para pedir ayuda. Sosa dormía y Osorio era como un espectador, miraba cómo me violaban. Estoy convencida de que voy a tener justicia porque la verdad es una y es mía”, indicó a la cadena de televisión TN.
“Después de que me violaran, Florentín y Cufré se vistieron y se fueron a jugar al casino. Quedé tirada en la cama sin entender bien qué estaba pasando. Comencé a sangrar. Como pude me arrastré al baño para limpiarme. Regresé y me volví a tirar porque seguía mareada y no encontraba mi ropa”, añadió.
“Allí advertí que Sosa seguía o parecía estar dormido y Osorio jugaba al Play como si nada hubiera pasado. Empiezo a reprocharle lo que me habían hecho sus amigos y cómo no intercedió para evitar que me violaran. De repente, cuando pensé que lo peor ya había pasado, Osorio saltó de una cama a la otra y comenzó a violarme él también”, puntualizó.
La joven de 25 años quiere que este capítulo en su vida pase lo más rápido posible y para ello sabe que necesita justicia para replantearse cómo será su vida a partir ese instante. A los cuatro jugadores se les rescindió el contrato con Vélez de forma unilateral, Sosa es el único que lleva el proceso en libertad, mientras que Florentín, Cufré y Osorio están en prisión domiciliaria a la espera del juicio.
“Por momentos tengo una angustia que no la puedo frenar. Me asusta mi futuro. ¿Cómo sigo? ¿Me voy a poder reincorporar a mi trabajo de periodista deportiva? ¿Qué jugador va a confiar en mí? ¿Cómo me saco el estigma de que yo fui la puta que fue a acostarse con los jugadores de Vélez? Me llama la atención el prejuicio que hay con las víctimas de abuso sexual. ¿Acaso esperan vernos golpeadas, chorreando sangre, con depresión y ojeras?”, sentenció.
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