Bélgica se convirtió en la mayor decepción de la Copa del Mundo al quedar eliminada en la Fase de Grupos luego de empatar 0-0 ante Croacia, la Subcampeona del Mundo que consiguió su boleto a Octavos de Final como segunda del sector F.
Fue un partido sumamente cerrado, estratégico, en el que los nervios se apoderaron de ambas escuadras y por ello hubo pocas alternativas claras de gol.
En la primera parte Kevin De Bruyne encabezó una descolgada de los 'Red Devils' y le puso un gran servicio a Dries Mertens, quien dentro del área y con todo para anotar voló su disparo.
Para los croatas la 'oportunidad' más clara de gol fue un penalti que se había señalado por una falta de Yannick Carrasco, pero la acción se revisó en el VAR y cuando Luka Modric se preparaba para disparar, la decisión se revirtió y no hubo tal pena máxima.
En el complemento el duelo fue de ida y vuelta, con gran desgaste físico pero se mantuvo la tónica de poca claridad para llegar a los arcos.
Romelu Lukaku ingresó al campo y desperdició un par de oportunidades, la más clara de ellas en los minutos finales cuando dentro del área chica no pudo controlar o rematar un esférico al fondo de la red.
De esta manera una generación dorada de Bélgica se despide de la Copa del Mundo y es el fin de un ciclo, mientras que Croacia espera rival en Octavos de Final.