Irán dio una lección de humildad y buen futbol ante Gales, pero cuando los postes, la suerte y el portero Hennessey, quien fue expulsado, parec\u00ecan impedir otro triunfo de una selección asiática en Qatar, dos milagrosos goles en el tiempo agregado le dieron un merecido triunfo 2-0.
Moore tuvo la mejor oportunidad para Gales en el minuto 12 del primer tiempo, cuando remató incómodo en el área pero el portero Hennessey atajó el violento disparo.
Gholizadeh respondió por Irán, pero la gran jugada que había armado con Samar Azmoun se anuló tras consultar el VAR, que señaló fuera de lugar.
Gareth Bale, la figura de Gales, no lograba conectar con sus compañeros, pese al gran esfuerzo por buscarle opciones, mientras Irán cerró el primer tiempo con un tiro lejano de Ahmad Noorollahi.
AVASALLADOR
En el arranque del segundo tiempo, Irán sorprendió con dos tiros al poste en una misma jugada, que terminó con otro remate que llegó a las manos del portero Hennessey.
Gales estaba acorralada por la presión de Irán en su área y sin gran intensidad buscaba salir hacia el frente, pero los asiáticos formaban un bloque sólido en media cancha que les permitía frenar al rival.
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En el minuto 73, otra vez se acercó Irán con peligro, con un tiro bien colocado de Ezatolah que desvió Hennessey con una gran estirada por abajo.
En el 83 llegó la jugada que pudo cambiar el partido, cuando el portero Hennessey se estrelló con Taremi fuera del área, luego de que el delantero había ganado un balón a profundidad. El árbitro amonestó, pero revisó la jugada en el VAR ante las protestas de los iraníes y expulsó al guardameta de Gales.
Irán atacó a Gales con mayor intensidad, el equipo de Bale parecía contener los ataques y defendía con todo, pero no contaban con el milagroso gol de Roozbeh Cheshmi, quien disparó desde fuera del área en el minuto 98.
Todavía en el minuto 111, Ramin Rezaeian consiguió el 2-0, en una escapada cuando Gales descuido su zaga, dos goles milagrosos para el triunfo de Irán. El milagro asiático sigue sorprendiendo en Qatar, luego del triunfo de Japón ante Alemania.