El último día de transferencias en el mercado europeo cerró este martes, con una triangulación que protagonizó Antoine Griezmann, quien volverá al Atlético de Madrid, tras llegar a un acuerdo con el Barcelona.
Griezmann deja el Barcelona en un préstamo por una temporada, con otra prorrogable, operación en la que el Atlético de Madrid tiene una opción de compra obligatoria en 2023 de 40 millones de euros, además de pagar su sueldo.
Todo tuvo un cierre digno de película, ya que al cumplirse el plazo, a las 00:00 horas en Europa, el movimiento no se había confirmado por ninguna de las partes involucradas, ya que para concretarse el Atlético necesitaba enviar a Saúl Ñíguez al Chelsea para poder inscribir a Griezmann, mientras el Barcelona necesitaba ese movimiento para inscribir a Luuk de Jong, delantero del Sevilla.
Al final, los clubes involucrados cumplieron el plazo al ingresar la documentación a tiempo, pero cerraron los márgenes pendientes minutos más tarde.
ÑÍGUEZ LO HIZO POSIBLE
Primero fue el Atlético de Madrid el que anunció el préstamo de Saúl Ñíguez por un año al Chelsea, varios minutos después de que se cumplió el plazo para el cierre de registros. Gracias a eso, pudo registrar a Antoine Griezmann, quien vuelve tras un paso gris por el Barcelona, en el que no pudo brillar durante los dos años que permaneció ahí.
El préstamo de Saúl al Chelsea incluye una opción de compra por 40 millones de euros, después de haber perdido el rol de titular indiscutible en el esquema de Diego Simeone el pasado diciembre.
Griezmann vuelve así al lugar donde mejor rindió y además de reencontrarse con Diego Simeone, volverá a compartir el ataque con Luis Suárez, quien fue 'desechado' del Barcelona la temporada pasada y resultó campeón de Liga con el Atlético de Madrid.