El pelotero cubano naturalizado mexicano Randy Arozarena, quien actualmente juega para los Marineros de Seattle en las Grandes Ligas, sorprendió la semana pasada a la comunidad maya de Hondoznot, municipio de Tulum, estado de Quintana Roo, al participar en  un encuentro amistoso de softbol con las Diablillas Mestizas, equipo integrado por mujeres mayas.

Arozarena aprovechó sus vacaciones en la Riviera Maya junto a su esposa y dos hijas, para aceptar la invitación de la gobernadora de Quintana Roo, Mara Lezama, y así cumplir con su promesa de jugar con el equipo amateur que ya ha sido reconocido internacionalmente con homenajes y documentales producidos por la Major League Baseball (MLB).

“Mi gente, lo prometido es deuda. Yo les dije que iba a jugar con las Diablillas de Hondzonot cuando estuviera en el Caribe Mexicano y… ¡Se cumplió! ¡Gracias por recibirme en su casa! Fue una increíble experiencia”, escribió Arozarena en sus redes sociales junto a un video de los momentos que compartió con las jugadoras, quienes se caracterizan por jugar descalzas.

Randy Arozarena jugó descalzo, tal como lo hacen estas jugadoras, quienes han sido reconocidas por las Grandes Ligas por jugar de esa manera y con sus vestidos típicos.

Luego del partido amistoso de softbol, Randy Arozarena quien ha jugado en Grandes Ligas para Cardenales de San Luis, Rays de Tampa Bay y Marineros de Seattle, se tomó fotografías con todas las Diablillas y sus familias, al tiempo de firmar autógrafos en sus huipiles.