El Milan atraviesa por una profunda crisis tras ser eliminado de la Champions League, sumó su tercera derrota consecutiva en la Serie A tras perder 1-2 ante la Lazio y Santiago Giménez no pudo pesar como en ocasiones anteriores, el delantero mexicano jugó todo el partido, no tuvo opciones claras de gol y fue amonestado al 76’ como producto de una falta sin sentido, fruto de la desesperación de todo el equipo.
La más clara que pudo tener Giménez se la quitó un compañero. Joao Félix desbordó por la izquierda al 54’ y metió un centro raso que buscaba a Santiago de cara al arco, se aprestaba a rematar, cuando Christian Pulisic, de manera incómoda, prefirió anteponerse y chorreó su tiro a un costado.
Fue una catástrofe más para un equipo que no para de hundirse, es noveno en la tabla, está a nueve puntos de los puestos que dan un sitio para la Champions y su situación es insostenible. Es un equipo incapaz de competir pese a la llegada de Sergio Conceicao, pese a haber ganado la Supercopa de Italia en enero y pese a haber llevado a cabo una pequeña revolución en el mercado de invierno con fichajes como Kyle Walker, Joao Félix o el mexicano Santiago Giménez.
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La crisis es tan aguda que San Siro ni siquiera estuvo lleno y gran parte de la afición entró tarde al estadio en forma de protesta por la mala temporada de su equipo. El resultado final, aunque condicionado por los aires de épica al rozar un empate con uno menos, agudizó las protestas de los aficionados, a los que sólo les queda aferrarse a la Copa de Italia.
Mattia Zaccagni abrió el marcador en el minuto 28 por los visitantes, al aprovechar el rechace de una parada de Mike Maignan. La Lazio tuvo el control desde ese momento en San Siro y el Milan, por si fuera poco, se quedó con uno menos por una entrada de Strahinja Pavlovic sobre un Gustav Isaksen, que se iba directo solo contra el portero.
Era el minuto 67 y el Milan, con uno menos, reaccionó por primera vez en mucho tiempo. Samuel Chukwueze pareció salvar un empate 'in extremis' con un testarazo que nadie esperaba en el minuto 85. Se volvió loco San Siro en busca de la remontada. Conceicao pidió a los suyos que se volcaran arriba y por unos momentos el cuadro rossonero le perdió el miedo a todo.
No se amilanó el Lazio, que con uno más también aprovechó los idas y vueltas hasta que, sobre la bocina, con Isaksen de nuevo como protagonista, Maignan arrolló al danés para, VAR mediante, cometer el penalti clave del partido. Pedro Rodríguez sumó su décimo gol en lo que va de curso y metió a la Lazio en puestos de Champions.
El Milan, pese a esos pocos minutos de reacción, acentuó su crisis. Es noveno con 41 puntos en una temporada para el olvido.
Con información de EFE.