Por Alina Navarrete Fernández / Corresponsal
Guerrero.- Turistas optan por dormir en automóviles debido a los altos costos de hoteles en el primer fin de vacaciones por la Semana Santa en Acapulco, luego del embate del huracán “Otis”.
De acuerdo con la Secretaría de Turismo de Guerrero, Acapulco alcanzó este sábado una ocupación hotelera general de 93.8% en las 8 mil 110 habitaciones disponibles tras el paso del huracán.
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La zona más concurrida por los turistas es la Dorada, que promedió una ocupación hotelera de 96.2%, seguida de la Diamante y la Náutica, que llegaron a una ocupación hotelera de 92.3% y 90.5%, respectivamente.
Virginia Merino viajó con su familia desde Tecámac, Estado de México, para pasar la Semana Santa en Acapulco; se trata de un grupo de 20 personas entre adultos y menores de edad que duermen en un automóvil y una camioneta, debido a los altos precios de los hoteles.
En entrevista con Latinus, Virginia contó que consultó en varios hoteles ubicados sobre la avenida Costera Miguel Alemán y sus alrededores, pero en todos el precio por noche era de unos 2 mil pesos.
“Hay quien lo paga, sí hay quien lo tenga, pero muchas personas no tienen con qué solventar un gasto así por una noche (…) por una sola noche está muy caro”, expresó.
Para Virginia Merino, el incremento de costos en los hoteles del puerto es injusto debido a que si bien es una práctica normal en periodo vacacional, actualmente el puerto continúa en reconstrucción y lo que se necesita es que repunte el turismo.
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“Realmente lo que necesitan (los acapulqueños) es que llegue gente a consumir, a que esté, a que vacacione y que les haga, digamos, los gastos, para que ellos puedan volver a levantarse”, dijo.
Virginia Merino y su familia duermen adentro de sus carros que estacionaron frente al asta bandera sobre la avenida Costera Miguel Alemán, debido a que el gobierno prohibió a los visitantes acampar o dormir en las playas.
Personal de la Guardia Nacional, la Secretaría de Defensa Nacional, la Marina, la Policía Turística y otras dependencias desplegaron un operativo de seguridad en Acapulco y recorren las playas durante la noche para evitar que las personas duerman ahí.
En un recorrido por las playas Caleta y Caletilla se observó una afluencia de turistas mayor a los últimos fines de semana largos, aunque la mayoría opta por llevar sus propios alimentos y bebidas.
Mientras que en la playa Las Hamacas aún se encuentran varios restaurantes y baños públicos en ruinas, cerrados por la reconstrucción que no ha concluido para los comerciantes afectados.
