Miles de fanáticos del Liverpool rebasaron las medidas de seguridad por coronavirus en los festejos por el título de la Premier League afuera del estadio de Anfield la noche del jueves.
El equipo de Jürgen Klopp se aseguró el título después de que el Manchester City perdiera 2-1 ante el Chelsea, en Londres. 30 años de espera terminaron para una afición que el año pasado celebró eufórica el título de Champions League.
A pesar de las restricciones debido a la pandemia de COVID-19, los fans del Liverpool acudieron en masa a Anfield y sus festejos rompieron las medidas de seguridad.
El cielo se pintó de rojo con bengalas y fuegos artificiales. Cantaron las famosas canciones del club, incluido el himno del equipo “Nunca caminarás solo”.
Pasada la medianoche pasada, multitudes a las afueras de Anfield seguían creciendo. Algunos aficionados escalaban las paredes del estadio.
Todos los juegos de la Premier League desde el reinicio se han celebrado a puerta cerrada. Los fanáticos no estaban en el estadio cuando el Liverpool venció a Crystal Palace 4-0 el miércoles.
El jefe de policía asistente de la policía de Merseyside, Rob Carden, dijo que la mayoría de los fanáticos habían respetado regulaciones de distanciamiento social.
“Desafortunadamente, no todos se adhirieron a las regulaciones vigentes”, agregó.
“En los próximos días, instamos a los seguidores a hacer lo correcto y celebrar con seguridad con los miembros de su hogar y en su burbuja social”.
Las celebraciones se apoderaron del centro de la ciudad, con el Edificio Cunard, junto al Pier Head, iluminado en rojo por la noche.
La policía mantuvo a los automóviles fuera del área, pero los partidarios de la ciudad tocaron sus cláxons con júbilo.
EL EQUIPO TAMBIÉN FESTEJÓ
“Todos hemos esperado tanto tiempo, todos los que han estado involucrados en el club, habían estado desesperados por llevar el título a casa para los aficionados”, dijo a Sky Sports el ex capitán del Liverpool Jamie Carragher, quien roció una botella de champán en el aire.
Los jugadores del Liverpool se reunieron en un hotel local y después de ver la transmisión del juego desde Stamford Bridge celebraron entre ellos, lejos de los aficionados.
“No le diremos la ubicación exacta, pero estamos todos juntos en un hotel como equipo”, dijo Andy Robertson.
“Pensamos que algo con suerte iba a suceder y así es como resultó”.
