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EFE.- Robert F. Kennedy Jr., hijo del fiscal general de Estados Unidos asesinado en 1968 y aspirante a la presidencia del mismo país, aunque con la clara oposición de la familia Kennedy, fue acusado este martes de abuso y adicción sexuales, según lo publica la revista Vanity Fair.
El medio especializado señaló que Eliza Cooney, una niñera contratada por la familia de Kennedy Jr. en 1998, cuando tenía 23 años, lo acusó de toqueteos y acoso sexual.
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Cooney, ahora de 48 años, declaró a la revista que poco después de ser contratada por el matrimonio formado por Kennedy Jr. y Mary Richardson, Kennedy le tocó la pierna debajo de una mesa. En otra ocasión, medio desnudo, le pidió que le frotará crema en su espalda.
Pocos meses después empezó a toquetearla en la cocina de la casa hasta que la llegada de otro empleado obligó a Kennedy Jr. a detener su presunta agresión sexual, según la información de Vanity Fair.
En 2010, Kennedy empezó una relación romántica con la actriz Cheryl Hines y se separó de Richardson, su segunda esposa, quien dos años después se suicidó.
Vanity Fair señaló que un amigo de Richardson relató como ella le confesó que Kennedy Jr. era un “adicto al sexo” que se medicaba para controlarse. La revista también añadió que en esos años, el abogado y político era conocido por enviar a sus amigos fotografías de mujeres desnudas con las que mantenía relaciones.
El artículo también relacionó al político, conocido por su negacionismo en torno a las vacunas de la Covid-19, así como por promover teorías conspirativas con el fatal brote de sarampión que en 2019 causó la muerte a 83 personas, la mayoría de ellos niños, en la Samoa estadounidense.
Inicialmente, el gobierno de Samoa se opuso a la vacunación masiva de la población, al mismo tiempo que una organización de Kennedy Jr. montó una campaña en contra de las vacunas. Posteriormente, el político negó cualquier relación con la campaña antivacunas pese a la evidencia de los contrarios.
En la red social X, Kennedy Jr. contestó al artículo, pero no para negar las acusaciones de abuso sexual o la campaña antivacunas en Samoa, sino por otra de las acusaciones de la revista.
Vanity Fair publicó una foto de Kennedy en 2010 sujetando los restos asados de un animal. La revista sugirió que la imagen era de un perro.
Pero en X, Kennedy Jr. acusó de amarillismo al medio para asegurar que la imagen había sido tomada en Patagonia y pertenecía a una cabra.
Kennedy Jr. aprovechó para atacar al Partido Demócrata, en el que militaron tanto su padre como su tío, el asesinado presidente John F. Kennedy.
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El político vinculó el artículo en Vanity Fair con el intento de los demócratas de “distraer” al país del “déficit cognitivo del presidente (Joe) Biden“.
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