Desde dos días extraviado en el Tíbet hasta una explosión al lado del colegio: las veces que Benedict Cumberbatch ha burlado la muerte

EFE.- El actor británico Benedict Cumberbatch, mundialmente conocido por interpretar al Doctor Strange en las películas de Marvel, es uno de los intérpretes más admirados de su generación. 

Ha sido reconocido con ocho nominaciones a los premios BAFTA, y ganador de uno de estos preciados galardones británicos por la serie “Patrick Melrose”. A lo largo de su carrera ha obtenido cuatro nominaciones a los premios Emmy y tres a los Globos de Oro.

Puedes leer: Michael Jackson tenía una deuda de 500 millones de dólares al morir: E!News

En 2013 recibió el premio Britannia otorgado por BAFTA Los Ángeles, que reconoce a los intérpretes que destacan en Hollywood, y en 2015 fue nominado al Óscar como mejor actor por “El código Enigma”.  

Ahora protagoniza la miniserie “Eric” de Netflix, avalada por la crítica y por el público, pero quizá uno de los aspectos más llamativos de este prestigioso actor son los episodios de su vida real, en los que ha sentido muy de cerca la muerte. 

Rondando la treintena, Benedict fue secuestrado en Sudáfrica junto a unos amigos, que fueron a visitarle durante el rodaje de serie “To the Ends of the Earth”, un drama histórico producido por la BBC.

Varios hombres armados los obligaron a ponerse de espaldas con las manos en la nuca, ahí sintió que se acababa todo. Encerrado en el maletero, decidió utilizar sus dotes de actor para llevar a la mente de sus secuestradores, que tendrían más problemas si aparecía muerto que si seguía vivo.

Finalmente, los dejaron con vida después de haberles robado todo el dinero de sus tarjetas. No era la primera vez que el actor británico sentía cerca el final de su vida, pues ya lo había estado rondando en varias ocasiones.

Te puede interesar: Fallece el actor Bill Cobbs a los 90 años; participó en cintas como “El guardaespaldas” y “Una noche en el museo”

Cuando era apenas un bebé, su cuidadora lo dejó solo en un tejado, bajó y se olvidó de él en pleno invierno londinense. Afortunadamente, se acordó de él cuando vio por la ventana que estaba nevando.

Cuando tenía 18 años, durante su época de estudiante, una bomba estalló en la embajada de Israel, que se encontraba al lado de su colegio. Reventaron las ventanas, todo se envolvió en una nube de polvo y en sus propias palabras, sintió que se movía el suelo bajo sus pies. Debido a esa explosión, perdió la audición durante varios días.

Al poco tiempo, el intérprete británico decidió concederse un año sabático antes de comenzar sus estudios universitarios, y fue profesor voluntario de inglés en un monasterio de monjes tibetanos. De hecho, Benedict Cumberbatch es un reconocido practicante de meditación.

Ahí fueron a visitarlo unos amigos y marcharon de excursión por las montañas del Tíbet. Se perdieron durante dos días, tenían tanta sed que, según comentó el actor públicamente, llegaron a exprimir musgo para poder obtener unas gotas de agua. Lograron dormir en un establo teniendo sueños alucinógenos provocados por el mal de altura.

Finalmente, encontraron a un sherpa, que los hidrató y les dio de comer, conduciéndolos de nuevo al monasterio.

Vista: Muere a los 49 años Shifty Shellshock, líder de Crazy Town e intérprete de “Butterfly”

Se sabe que Benedict saltó de un taxi al ver que cuatro hombres estaban atacando a un ciclista para ayudarlo y también se ha conocido hace poco que un exchef irrumpió en el jardín de su casa armado con un cuchillo y profiriendo amenazas contra él, su mujer y sus tres hijos, que se encontraban en el interior.

Esta perspectiva de haber visto a la muerte tan de cerca en numerosas ocasiones le ha cambiado la vida. Cumberbatch ha manifestado que “estos eventos sísmicos te dan una perspectiva sobre la mortalidad. Te das cuenta de que no debes preocuparte por las cosas pequeñas. Sólo de disfrutar el paseo de estar vivo”. 

Sobre el conato de secuestro de Sudáfrica, dijo: “Me hizo querer vivir una vida menos ordinaria”. Y pocas personas podrán negar que lo haya conseguido.

Este actor habla seis idiomas. Además de su inglés natal, puede desenvolverse en japonés, alemán, portugués, chino y griego.

Su profesor en el colegio lo calificó como “el mejor actor escolar” con el que jamás había trabajado, aunque ello no le impidió advertirle que el mundo de la farándula era un “negocio difícil”. 

Hijo de actores, Benedict se ha dedicado a la actuación desde sus inicios, siendo uno de los artistas más versátiles que pueden encontrarse en la actualidad.

Te recomendamos: Lindsay Lohan y Jamie Lee Curtis juntas otra vez: “Un viernes de locos 2” se estrenará en 2025

Entre sus múltiples actuaciones, Cumberbatch ha interpretado a los científicos Alan Turing y Stephen Hawking, al pintor Vicent van Gogh, al superhéroe Doctor Stranger y al detective Sherlock Holmes,  que fue el personaje con el que saltó a la fama.

Ha puesto su voz en “Pingüinos de Madagascar” y ha prestado su gesto y su voz a Smaug, el terrible dragón de las dos últimas películas de “El Hobbit”. Ha interpretado varias obras de teatro clásico, y cuando se hizo público que volvía a protagonizar “Hamlet“, se vendieron las entradas con un año de antelación.

Además, en 2015 fue nombrado comandante de la Orden del Imperio Británico (CBE) por la reina Isabel II en el Palacio de Buckingham. Una distinción que le reconoció no sólo sus grandes dotes como actor, sino también su labor benéfica, que desarrolla en numerosas causas dentro y fuera de su país de origen.

En la actualidad el actor está en la miniserie “Eric”, estrenada en Netflix. En esta ocasión, interpreta a un titiritero de éxito de una serie de televisión quien, cuando su hijo desaparece, tendrá que enfrentarse a todos sus demonios para poder recuperarle.

La ciudad de Nueva York de los años 80 actúa como alter ego del propio personaje, mostrando que nunca fue una buena idea enterrar la suciedad en las profundidades. Algo que va descubriendo poco a poco el detective Ledroit (Mckinley Belcher), encargado de la desaparición del pequeño.

Eric, el personaje que da título a la serie, es la marioneta que ha diseñado el propio hijo del protagonista, y que es clave en todos los capítulos. En un momento dado, la mujer de Vincent —personaje que interpreta Cumberbach—, y madre del hijo desaparecido (Gaby Hoffmann), se pregunta qué tienen de especial los guiñoles que nos gustan tanto. “Ellos dicen lo que nosotros no podemos”, sentencia Lennie Wilson, colega de trabajo de Vincent, interpretado por Dan Fogler.

Esta web usa cookies.