Xóchitl Gálvez y Claudia Sheinbaum vuelven a hacer de la corrupción el tema central de la discusión en el último round presidencial

cuartoscuro-debate-presidencial
Foto: Cuartoscuro

Por Ivette Solórzano

El último cara a cara rumbo a la presidencia de México comenzó faltando exactamente 13 días y siete horas para el día de las elecciones, según la cuenta regresiva oficial del Instituto Nacional Electoral (INE); inseguridad, crimen organizado, migración, política exterior, democracia, pluralismo y división de poderes fueron los temas que debatieron las candidaturas.

Xóchitl Gálvez, la aspirante de la oposición, llegó con el espaldarazo de la Marea Rosa, que esta mañana inundó el Zócalo de la Ciudad de México en apoyo a su proyecto. Durante su ingreso a las instalaciones del Centro Cultural Universitario Tlatelolco, tan sólo al descender de su auto, Gálvez se mostró animada y dijo que venía con fuerza, muy a su estilo desenfadado y espontáneo, dirigiéndose a las cámaras alzó el brazo derecho con el puño arriba en señal de fortaleza.

Te puede interesar: “Conmigo no se tienen que preocupar por quién es peor, García Luna o García Harfuch”, dice Máynez sobre la seguridad en el país

Claudia Sheinbaum, en su intento por retomar el Zócalo que esta mañana se pintó de rosa, anunció que para este próximo 29 de mayo se pintara de guinda, haciendo oficial su cierre de campaña en dicho espacio, llamando a sus simpatizantes a acudir a las 4:00 de la tarde.

El debate se llevó a cabo en el salón del Centro Cultural Tlatelolco, donde hace seis años, Andrés Manuel López Obrador, recién nombrado presidente electo, juró jamás reprimir al pueblo mexicano. Hoy, aquí mismo, la candidata del oficialismo, Claudia Sheinbaum, defendió la estrategia de seguridad de la Cuarta Transformación, misma que se ha caracterizado por la militarización del país.

“Habrá sorpresas”, así anunciaba Xóchitl Gálvez que estaba preparada para este encuentro final, su haz bajo la manga era la denuncia formal contra la candidata del oficialismo acusándola de tener nexos con el crimen organizado, razón por la que aseguró que en el pasado encuentro presidencial la llamó “narcocandidata”.

El nombre de Anabel Hernández tomó relevancia en el bloque de Inseguridad y crimen organizado, presentándose como sustento de las descalificaciones en contra de Morena y de su candidata, mientras Claudia Sheinbaum se defendía desacreditando las fuentes que la periodista utilizó para su libro.

Para el bloque de migración y política exterior, los candidatos pasaron de las acusaciones a la propuesta y a la defensa. Álvarez Máynez, de Movimiento Ciudadano, apostó por la condena a lo sucedido en Ucrania y en Israel, Gálvez le apostó al “nearshoring” y Sheinbaum defendió las acciones realizadas durante este sexenio.

Sigue leyendo: Xóchitl Gálvez señala hipocresía en la política migratoria de Morena: “Se dobló ante Trump y dejó morir a 40 centroamericanos en Juárez”

Durante la recta final, los candidatos centraron su mensaje en la petición del voto, con un formato menos confrontativo, un tono más mesurado y pocas propuestas. Así concluyó el tercer y último cara a cara presidencial.

Comparte esta nota