El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo este martes en la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) que Ecuador debe ofrecer que nunca más volverá a hacer una “canallada“, luego del asalto a la embajada de México en Quito para detener al exvicepresidente Jorge Glas.
Además, pidió que los países se sumen a su denuncia contra la nación latinoamericana en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) y agradeció la solidaridad de los pueblos y gobiernos de América Latina y el Caribe.
“Queremos también proponerles, que si lo consideran viable y factible, que nos acompañen suscribiendo la denuncia en el tribunal de justicia internacional”, declaró el mandatario federal en su mensaje inicial.
López Obrador reafirmó que su denuncia busca como sentencia “una expulsión de Ecuador de Naciones Unidas, en tanto no haya una disculpa y un ofrecimiento de no repetición”, tras el allanamiento a la sede diplomática mexicana el pasado 5 de abril.
El evento de la Celac, cuya presidencia pro tempore la ocupa la mandataria de Honduras, Xiomara Castro, comenzó hacia las 09:00 de la mañana con la ausencia de algunos jefes de Estado de la región.
En la cumbre, el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, anunció el cierre de su embajada y consulados en Ecuador en apoyo a México, mientras que el mandatario de Bolivia, Luis Arce, adelantó que se sumará a la denuncia del gobierno mexicano.
López Obrador expresó ante sus homólogos que considera un “agravio y una flagrante violación” a la soberanía de México y al derecho internacional el allanamiento que realizó la policía de Ecuador en la embajada llevarse al exvicepresidente, Jorge Glas, resguardado ahí ante un proceso de corrupción.
Argumentó que la denuncia que interpuso el jueves pasado ante la CIJ, con sede en La Haya, busca sentar un precedente.
“Lo segundo y también muy importante es que se defina un procedimiento a partir de este caso, que si cualquier Estado actúa de la manera como lo hizo Ecuador, el tribunal de justicia presente a la Asamblea General de Naciones Unidas su resolución de expulsión definitiva de la ONU“, apuntó.
“Si no hacemos esto, no vamos a poder vivir en un mundo regido por normas, por leyes. Le decía yo al presidente (Luiz Inácio) Lula que sería el mundo de los gorilas”, agregó.
La polémica creció porque un tribunal de Ecuador declaró el viernes pasado la detención de Glas dentro de la embajada mexicana como ilegal y arbitraria, aunque quedó encarcelado por casos pendientes.
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“Desde luego, está de por medio el derecho de asilo, ustedes saben lo que ha significado históricamente para México el garantizar la protección y el asilo a perseguidos políticos, es algo histórico”, comentó López Obrador.
Horas antes, el mandatario expresó en su conferencia matutina que “no es una frivolidad” el conflicto con Ecuador después de que el presidente ecuatoriano, Daniel Noboa, dijo el lunes que lo invitaría a comer ceviche o probablemente tacos para arreglar la crisis.
