Denise Dresser asegura que el proceso del próximo 2 de junio será una elección de Estado debido a la forma en que Morena y el gobierno han desnivelado la cancha, en particular desde la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador.
La politóloga advierte de un retroceso de 30 años en términos de la equidad en la competencia, y como en los viejos tiempos del PRI, por debajo de la mesa hay una maquinaria en marcha que opera con dinero de todos a favor de Morena.
Se trata, agrega, del mismo esquema clientelar del salinismo, con otros nombres, pero los mismos objetivos, a lo que suman medios oficialistas y autoridades electorales a las que ya acusan de orquestar un “golpe de Estado técnico”.
La forma en que opera el lopezobradorismo, explica, recuerda la Guerra Fría: desviar la crítica a tu sistema atacando al otro. Y así se habla de “guerra sucia”, ignorando el lodazal propio porque, insiste, será una elección de Estado aunque el mandatario lo niegue.
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