Foto: Claudia Sheinbaum / Redes
Por José Gerardo Mejía y Marco Duarte
El evento que tuvo Claudia Sheinbaum en el Estadio Morelos se vio empañado con la retirada de simpatizantes que no soportaron las horas de espera bajo un intenso sol que ocasionó que algunos de ellos fueron sacados en camillas.
El termómetro llegaba a los 28 grados cuando la candidata presidencial morenista subió al templete de la casa del Atlético Morelia, y aunque en algún momento el recinto estuvo lleno, tras una espera de hasta cuatro horas, parte de la militancia enfiló hacia la salida, principalmente los que ocupaban las gradas de las cabeceras, donde algunos no pudieron resistir y terminaron desvaneciéndose.
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El gobierno del morenista Alfredo Bedolla y alcaldes de 44 de 112 municipios se encargaron de llenar las 35 mil butacas que tiene el estadio y meter otras 5 mil personas a nivel cancha.
“¡Qué solazo! Aun así, 40 mil personas en este hermoso escenario”, abrió Sheinbaum en su mensaje. Antes del mitin, la candidata de la coalición Sigamos Haciendo Historia enumeró las entidades que ha visitado en sus primeros 10 días de campaña: Ciudad de México, Chihuahua, Jalisco, Estado de México, Guanajuato, Querétaro, Hidalgo, Michoacán, y más tarde, en Atlacomulco, municipio mexiquense.
“Si consideramos el día de mañana, también habremos estado en Puebla. Hasta este día llevamos 23 de los 300 distritos que tenemos como meta recorrer en la campaña”, aseguró.
En el mitin, Sheinbaum estuvo acompañada por Raúl Morón, a quien el 27 de abril de 2021 las autoridades electorales anularon su candidatura a gobernador por no entregar reportes de gastos de precampaña. Morón, ahora candidato al Senado, aseguró que “el pueblo de México no quiere retrocesos”.
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“Con el segundo piso de la Cuarta Transformación habrá un país diferente, pero no hay que confiarnos, entonces, a trabajar, a ganar muchos votos para ganar de manera escandalosa”, subrayó.
En el mitin, Sheinbaum se comprometió a fortalecer la educación en el país y “a los jóvenes, para que tengan una vida de bienestar, no de guerra, no de muerte”.
En su cierre, recordó a Felipe Calderón, expresidente de México originario de Michoacán, a quien responsabilizó de “haber iniciado una guerra que alejó a los jóvenes de las aulas y los acercó a los grupos delictivos”, cuando en el lugar del mitin la temperatura subía a los 29 grados.
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