Por Latinus Investiga
La violencia y el miedo dominan varias regiones de Guerrero, a tal grado que sus habitantes han establecido un toque de queda de facto.
La suspensión de los servicios de transporte ante el asesinato de choferes en Acapulco, Chilpancingo, Taxco y Zihuatanejo son la consecuencia de las extorsiones y el cobro de piso que afectan a los prestadores de servicios y comerciantes.
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Latinus recorrió diversas zonas de la entidad en las que ni el despliegue de 15 mil elementos de las fuerzas de seguridad federales han logrado eliminar el miedo y la inseguridad que viven los guerrerenses.
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