Por Fernando Miranda / Corresponsal
Oaxaca.– La Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) exigió al gobierno estatal, encabezado por el morenista Salomón Jara Cruz, acciones urgentes e integrales ante la falta de agua potable que padece el hospital general Dr. Aurelio Valdivieso.
La falta de agua derivó en la suspensión de labores en el hospital el pasado 22 de febrero; la carencia del servicio es consecuencia de la crisis hídrica que padece la ciudad y su zona conurbada desde hace varios meses, pero que se ha agudizado recientemente.
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El hospital afectado es el más grande de la capital oaxaqueña, tiene bajo su responsabilidad a 859 mil 460 habitantes, además de ser un centro médico de referencia para 15 hospitales generales y 750 centros de salud.
Ante dicho panorama, el órgano autónomo advirtió sobre el riesgo de que se produzcan “daños de difícil o imposible reparación en detrimento al derecho a la salud de la ciudadanía”, por lo que emitió medidas cautelares dirigidas a la Dirección General de los Servicios de Salud de Oaxaca (SSO) y al director general del Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado (Soapa).
Estas medidas cautelares son parte del seguimiento al cuaderno de antecedentes DDHPO/CA/0051/(01)/OAX/2024; al respecto, la defensoría informó que se están violentando los derechos de integrantes de grupos vulnerables como son niños, adolescentes, mujeres, integrantes de la comunidad LGBT+, personas con discapacidad, personas mayores, así como toda la población oaxaqueña.
La DDHPO recordó que la salud es un derecho humano “fundamental e indispensable para el ejercicio de los demás derechos humanos”; mientras que el derecho humano al agua se erige como universal. Y puntualizó que le corresponde al Estado garantizar el acceso a ambos.
“Una vez que la defensoría analizó los sucesos, considera que las circunstancias cuentan con los riesgos latentes, al presentarse nuevamente una suspensión del servicio de agua potable, lo cual conlleva un peligro inminente para la integridad física y la salud de las personas que acuden a recibir atención médica a dicho hospital”, indica el documento sobre las medidas cautelares.
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Para la defensoría es urgente la atención, la falta del líquido afecta al personal médico y puede agravar las condiciones de salud de los pacientes al no contar con el servicio necesario.
Fundado hace casi 59 años, el hospital Dr. Aurelio Valdivieso cuenta con 180 camas censables y 60 no censables y recibe a pacientes canalizados desde 15 hospitales generales, 750 centros de salud, 20 Unidades de Especialidades Médicas y 19 hospitales comunitarios.
También debe prestar servicios médicos a personas enviadas desde 152 unidades móviles, 473 Unidades Médicas Rurales y nueve rurales de segundo nivel, y del Centro de Oncología y Radioterapia de Oaxaca (CORO) y del Centro Especializado para la Atención de la Violencia Familiar Sexual y de Género.
Las medidas cautelares ordenaban a la Secretaría de Salud de Oaxaca que, en el ámbito de su competencia, “busque el establecer una planta de tratamiento de agua residual adecuada, así como la adopción de los mecanismos y acciones efectivas que garanticen los servicios de salud con los que cuenta el hospital civil”.
Mientras que al Director General del Sistema Operador de los Servicios de Agua Potable y Alcantarillado pide que de manera coordinada “implemente las estrategias necesarias para garantizar el suministro constante y suficiente de agua potable de calidad” en dicha unidad médica y en los demás centros de salud públicos, hospitales y clínicas con los que cuente Oaxaca.
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“Esta Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (…) reconoce el derecho a la salud y al agua como un derecho de todas las personas, por ello brindará puntual seguimiento a dichas medidas emitidas y de esta manera evitar probables violaciones graves a los derechos humanos de imposible reparación”, advirtió.
Los propios Servicios de Agua Potable y Alcantarillado del estado explican que por la temporada de sequía, la zona metropolitana de Oaxaca tiene un gasto aproximado de a penas 195 litros por segundo cuando debería ser de 400 litros en ese mismo periodo de tiempo.
Actualmente, 26 mil 500 hogares de 26 colonias no tienen acceso al agua mediante tuberías, por lo que fueron incluidos en el programa Juntos Llevamos Vida, que busca combatir el estiaje repartiendo 27 millones de litros de agua en la zona metropolitana de los valles centrales, llevando mil 100 litros por domicilio a través de pipas.
