AP.- Con Cristiano Ronaldo como testigo, entre otras celebridades, Anthony Joshua venció a Otto Wallin mediante un nocaut técnico en el quinto asalto, mientras que Joseph Parker dio la sorpresa al imponerse por decisión unánime sobre Deontay Wilder, en una doble cartelera de los pesos pesados, realizada el sábado en la Kingdom Arena, en Arabia Saudita.
Se esperaba que la doble función definiera un duelo entre Wilder y Joshua para marzo. En vez de ello, Parker parece perfilado a disputar ese combate, cuyo ganador espera obtener una oportunidad por buscar el título unificado, mismo que se definiría el 17 de febrero, cuando Tyson Fury y Oleksandr Usyk choquen también en Arabia Saudí.
En lo que va de este siglo, no ha habido un monarca absoluto en la categoría de los pesados.
Parker, de 31 años y quien de ningún modo era el favorito de las casas de apuestas, lució como el mejor durante el pleito. Wilder, de 38 años, pareció resentir su edad en un duelo entre excampeones de la máxima categoría.
Desde el comienzo, Parker (34-3) ejerció su dominio, asestando derechazos potentes y haciendo que Wilder retrocediera, con una pelea inteligente y metódica.
“Fue una pelea peligrosa y dura. Entrenamos muy duro para esto”, dijo Parker. “Llegamos a esta pelea con un buen impulso. La estrategia indicaba que debíamos mantener la calma. Teníamos que relajarnos y concentrarnos… en cada minuto de cada round. Es una gran forma de terminar el año”.
En el combate principal, la esquina de Wallin pidió frenar la pelea, al concluir el quinto asalto.
Joshua, el gran favorito, necesitaba más que una victoria para convencer a los escépticos de que sus mejores días no habían quedado atrás.
El británico mostró buen estilo para cosechar puntos frente al suelo Wallin, de 33 años.
Joshua (27-3) no había sido el mismo desde que ostentó los títulos de la Asociación Mundial, Federación Internacional y Organización Mundial de Boxeo. Pero el púgil de 34 años brindó una actuación como la de antaño.
Lanzó bien el jab y avanzó con confianza, para provocar el repliegue de Wallin (26-2). Una buena combinación de derecha e izquierda en el quinto acto llevó al nocaut técnico.
“Fue sólo otra pelea. Respeto a Otto”, dijo Joshua. “No fue tanto como un recuerdo, sino otro día de trabajo. Simplemente soy un boxeador con talento, que tiene un don especial, y trato de aprovechar al máximo mis capacidades”, apuntó.
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