Por Jaime Luis Brito/ Corresponsal
Morelos.- Luego de que la Sección Instructora de la Cámara de Diputados del Congreso de la Unión aprobó el dictamen que favorece el proceso de desafuero contra el fiscal general de Morelos, Uriel Carmona Gándara, el funcionario dijo que podría no acudir a la sesión de este miércoles del Legislativo a ofrecer directamente su versión.
“Hay un rumor de que se me pretende detener ilegalmente —por agentes de la Fiscalía General de la República (FGR)—. Técnicamente, tengo derecho a exponer mi versión de las cosas, mandaré a mi abogado, esto es una persecución política, hay mala intención, dolor y saña”, sostuvo en declaraciones a medios de comunicación esta tarde.
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Respecto al proceso, el fiscal dijo que se encuentra tranquilo, pues afirmó que la Constitución lo protege y será el Congreso de Morelos el que decida su futuro en última instancia.
La ley establece que para poder proceder penalmente por delitos federales contra miembros de organismos a los que las constituciones locales les otorguen autonomía —como la fiscalía de Morelos— la declaración de procedencia del desafuero deberá ser comunicada a las legislaturas locales.
El fiscal de Morelos es acusado de ejercicio indebido del servicio público, al haber asumido el cargo sin tener aprobados los exámenes de control y confianza.
Insistió en que todo este proceso “es político, es una persecución de la que he sido víctima desde hace años. La persecución política proviene del gobierno de Morelos, para quien he resultado incómodo desde el principio. Tenemos algunas denuncias que han incomodado al Poder Ejecutivo y luego escala ya a esferas más altas en el poder”.
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Además, insistió en que teme por su seguridad: “Se me ha calificado como opositor al Estado, al grupo que ejerce el poder y no lo soy, siempre he estado dispuesto a colaborar, sin embargo, el embate político así está, y no me queda de otra más que ajustarme a las reglas del derecho. No tengo otra herramienta para defenderme más que la razón y las leyes”.
Cabe recordar que el fiscal de Morelos fue detenido el 4 de agosto pasado por la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México y sometido a tres procesos por el feminicidio de Ariadna Fernanda, ocurrido en octubre de 2022; mientras que la FGR lo tiene bajo proceso por tortura.
