Denise Dresser expone la manera en que el presidente Andrés Manuel López Obrador ha ido socavando a las instituciones democráticas sin el menor escrúpulo, con miras a lograr una elección de Estado que secuestre a México… otra vez.
El mandatario también se vale de cualquier tipo de marrullerías para someter a todo actor relevante, sean periodistas, intelectuales, empresarios o facciones políticas. Oponerse a él significa perder contratos o ser investigado por las instancias de las que dispone.
Vivimos un retroceso en términos democráticos: millones de pesos se destinarán a las elecciones vía funcionarios de primer nivel y siervos de la nación. Un ejército que barrera México, ya sea que porten un chaleco guinda o un uniforme militar.
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