Por Fernando Miranda / Corresponsal
Oaxaca.– El gobernador morenista Salomón Jara Cruz desestimó los reclamos de trabajadores de un hospital en Juchitán y aseguró que al gobierno de Alejandro Murat no se le exigió de la misma forma.
“Los gobiernos anteriores, perversos, crearon estas condiciones para que ahora los trabajadores de salud protesten. ¿Por qué no lo hicieron cuando estaban ellos? ¿Por qué no se los exigieron cuando estaban ellos? Al contrario, callados, silenciosos, entonces… ¡Ya chole!”, expresó.
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Hace dos semanas que 400 trabajadores del hospital civil de Juchitán de Zaragoza “Macedonio Benítez Fuentes” comenzaron sus protestas contra las condiciones de abandono en el que se encuentra esta unidad médica.
El mandatario acusó que “se hace mucho ruido” sobre el estado del hospital, del cual desconocía las condiciones. En un principio aseguró que era viejo, sin embargo, fue construido apenas en 2018 por personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) tras la demolición del edificio anterior. El edificio anterior resultó dañado severamente por el terremoto de 2017.
Los empleados del hospital emprendieron un paro parcial de labores luego de que descompusieron los cinco elevadores de edificio, lo que les impide realizar los traslados de los pacientes desde los pisos a los quirófanos y otras áreas.
Por esa razón, desde el pasado 3 de octubre están suspendidas las cirugías, consultas externas y servicio de laboratorio. Sólo hay servicio en el área de urgencias.
Además de la reparación de todos los elevadores, los trabajadores explican que entre sus demandas también se incluye la reparación de todos los elevadores, que sean reparadas las cuatro ambulancias, pues sólo funciona una, y que se ordene “el inmediato abasto de medicinas e insumos”.
Según Jara Cruz, las protestas de los trabajadores de salud son parte de las “bombas de tiempo” que le heredó el gobierno de Alejandro Murat, con la intención de que le “tronarán” a su administración.
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Los manifestantes también exigen la construcción de una rampa de emergencia, misma que no fue incluida por el personal de la Sedena en la construcción y que impide, por ejemplo, desalojar a pacientes en camilla ante siniestros como un sismo.
Durante la misma conferencia, Alma Lilia Velasco, titular de los SSO, lamentó que en cuatro años de la anterior administración se mantuvo en abandono al hospital de Juchitán sin darle mantenimiento a los elevadores, y aseguró que hace dos meses este gobierno sí le dio mantenimiento, pero justificó que no se pueden hacer todas las cosas “de un momento a otro”.
“Es mucho recurso, pero no podemos inyectarlo sólo en un hospital, se van a habilitar tres elevadores y vamos a dejar pendientes dos y lo de la rampa de acceso va a quedar pendiente. Lo que pedimos es un poco más de tiempo”, dijo.
Ante lo que consideran como una falta de respuesta positiva de las autoridades de salud, este lunes los 400 trabajadores, incluidos personal médico, de enfermería y administrativo, marcharon hoy en esta ciudad zapoteca, con la advertencia de que las protestas pueden escalar.
“Para mañana se espera que lleguen las autoridades del área de infraestructura de los SSO. Esperamos que traigan respuestas positivas, de lo contrario, convocaremos a los 4 mil compañeros de las 19 delegaciones a que se sumen al paro y a las movilizaciones”, afirmó Carlos León Díaz, el representante sindica del hospital civil de Juchitán, durante la protesta.
Tanto los representantes sindicales como el personal de salud cuestionó que no se atiendan las demandas de los trabajadores, pero sí se destinen recursos a rotular el hospital como parte del IMSS-Bienestar cuando no siquiera se ha oficializado su transferencia a dicho organismo, por lo que sigue bajo la jurisdicción del gobierno de Oaxaca.
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Además, denunciaron que en el hospital civil del municipio indígena de San Pedro Huamelula, también en el Istmo, donde se atienden comunidades chontales, los trabajadores están en paro desde principio del mes, también por las condiciones de abandono.
