Una investigación publicada en 2021 que analizaba uno de los cuerpos encontrados junto a los que presentó Jaime Maussan ayer en la Cámara de Diputados, concluyó que la cabeza muestra coincidencias elevadas con el cráneo deteriorado de una llama.
Un estudio publicado por la Revista Internacional de Biología y Biomedicina en 2021 analizó a “Josephina”, uno de los siete cuerpos que se encontraron en Palpa e Ica, en Perú.
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Los expertos de la Secretaría de Salud de Campeche y el Instituto de Tecnología de Chipre encontraron que el cráneo de este cuerpo estaría conformado por un hueso deteriorado de llama.
“Si se intenta hacer coincidir el cráneo de ‘Josephina’ con el cráneo de un animal existente, se puede observar que, posiblemente, la mejor coincidencia es el cráneo de una llama y/o una alpaca”, señaló.
Para el estudio de este cuerpo de 58 centímetros se llevó a cabo una tomografía computarizada en donde se comparó con el cráneo de una llama y una alpaca.
“Se demostró que la cabeza del pequeño cuerpo está hecha en gran parte de un cráneo de llama deteriorado y otros huesos no identificados”, se lee.
Sin embargo, se encontraron diferencias en el espesor del cráneo, que podría ser a causa del deterioro, en las placas bucales y en el área occipital, la parte posterior de la cabeza.
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“La densidad de los huesos de la cara coincide muy bien con la densidad del resto del cráneo. No se ven costuras con pegamentos y todo el cráneo forma una unidad”, agrega el texto.
El estudio se concentró sólo en uno de siete cuerpos momificados similares encontrados en la ciudad de Palpa, de acuerdo con la publicación.
Por su parte, Maussan enfatizó que los seres presuntamente extraterrestres no se tratan de cuerpos recuperados en naves que cayeron sobre la Tierra, sino que estaban sepultados.
