El 90% de los homicidios de defensores ambientales en 2022 a nivel global ocurrieron en Latinoamérica: Global Witness

En América Latina se reportan casi nueve de cada 10 homicidios de defensores del medioambiente
Foto: EFE

EFE.– Casi nueve de cada 10 homicidios de personas defensoras de la tierra y el medioambiente de todo el mundo ocurrieron en Latinoamérica durante 2022, donde Colombia fue el país que registró mayor número de agresiones letales, según un informe difundido hoy por Global Witness.

Entre sus conclusiones, revela que al menos 177 de estos activistas fueron asesinados el pasado año y las nuevas cifras elevan a mil 910 el total de asesinatos de personas que protegen el planeta entre 2012 y 2022.

Te interesa: La ONU denuncia escalada de la persecución a disidentes en Nicaragua

En la presentación del informe, Laura Furones, asesora principal de la campaña de las personas defensoras de la tierra y el medioambiente, dijo que al igual que sucedió en años anteriores, “queda muy claro que la situación en Latinoamérica sigue siendo particularmente preocupante”. 

Furones remarca que 11 de los 18 países donde se documentaron esos casos pertenecen a esa región y que Colombia fue el país “particularmente azotado por este grave problema”, con el mayor número de ataques letales.

“Si tomamos en cuenta todas las cifras a nivel global de esta última década, Colombia es el país número uno en asesinatos de personas defensoras”, dijo.

En concreto, ese país registró en 2022 la mayor tasa de homicidios del mundo, con 60 muertes en total, más de un tercio de los asesinatos ocurridos, por encima de cualquier otro.

Desde 2012, en Colombia se han matado al menos a 382 activistas, lo que lo convierte, además, en el país con el mayor número de asesinatos denunciados en el mundo durante ese periodo.

Lee también: “Que nunca más la violencia sustituya al debate democrático”, dice Boric en la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado en Chile

Dentro de Latinoamérica, que concentró en 2022 la mayoría de los homicidios registrados ese año —88%— otros países con una elevada tasa de ataques mortales el pasado año fueron Brasil, con 34 asesinatos; México, con 31; y Honduras, con 14. Fuera de la región, en Filipinas murieron un total de 11 personas defensoras.

Los hallazgos se conocen antes de la COP28, prevista para noviembre en los Emiratos Árabes, donde se hará balance de los progresos realizados en la aplicación del Acuerdo de París (2015).

Desde entonces, y hasta el 31 de diciembre de 2022, se reportaron mil 390 homicidios de personas defensoras, destaca Global Witness, que lamenta que los gobiernos no investigan esos crímenes de forma adecuada y que la impunidad resultante fomenta nuevas agresiones.

Shurti Suresh, codirectora de campañas de la organización, insta a los gobiernos a “atajar urgentemente los asesinatos sin sentido de quienes defienden nuestro planeta, entre otras cosas, protegiendo los ecosistemas más valiosos, que desempeñan un papel fundamental para hacer frente a la emergencia climática“.

La Amazonía, uno de los lugares más peligrosos

Este análisis apunta a la Amazonía como uno de los lugares más peligrosos del mundo para los activistas y en esa área, el pasado año, se produjeron 39 asesinatos, más de uno de cada cinco —22%– de los registrados en todo el mundo.

En total, desde 2014 se ha asesinado a, por lo menos, 296 personas defensoras en la Amazonía.

Puedes revisar: Bajo el gobierno de AMLO, defensores ambientales sufren violencia sin precedentes

En el informe se plasman casos de comunidades indígenas de la selva tropical que se enfrentan a amenazas derivadas de actividades como la minería del oro y la explotación forestal.

Según esto, se ha relacionado a empresas con sede en el Reino Unido, la Unión Europea (UE) y Estados Unidos con violaciones de derechos humanos cometidas contra esas comunidades, al haberse descubierto oro extraído ilegalmente de tierras de los kayapós en las cadenas de suministro de la refinería de metales preciosos italiana Chimet y de la empresa minera Serabi Gold.

Furones recuerda que “los pueblos indígenas son los mejores custodios de los bosques y, por tanto, son imprescindibles en la mitigación de la crisis climática“.

Sin embargo, agrega que “en países como Brasil, Perú y Venezuela los están asediando precisamente por llevar a cabo esa labor”. 

Comparte esta nota