Por Yogui Rojas / Corresponsal
Camino a un evento inaugural de Chichén Viejo, donde se presentaron rescates arqueológicos, el presidente Andrés Manuel López Obrador se disculpó por la larga demora que tuvo para llevar al evento, debido las labores de supervisión del Tren Maya.
De acuerdo con versiones extraoficiales, luego confirmadas por el propio presidente, estuvieron revisando a detalle que se pueda circular sobre los rieles, incluso con paradas en el trayecto, porque “no es lo mismo hacerlo por aire, sobrevolando la zona”.
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Este viernes, también se dio una larga parada, que habría ocurrido entre Campeche y Mérida a la altura de Hecelchakán, dejó varado el convoy ferroviario más de una hora.
Entonces, llegar de Campeche a la estación de Teya, un poblado cercano a Mérida —que en automóvil se realiza en unas tres horas y 15 minutos—, le tomó al Tren Maya unas 11 horas porque salió a las 13:00 horas y arribó pasadas las 23:00 horas a ese punto.
Este sábado en Yucatán, el tren se detuvo a la altura del municipio Yaxcabá —a media hora de Chichén Itzá— por una hora y 15 minutos.
Según la información difundida por medios nacionales, en la cabina del tren estaba Maité Ramos Gómez, directora de Alstom México, empresa constructora del tren, un militar, y el empresario Daniel Chávez Morán, del grupo Vidanta, consorcio que construye hoteles de lujo, el cual estaría a cargo de varios proyectos en la zona del trayecto ferroviario.
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La presentación de los rescates arqueológicos de Chichén Viejo se hizo al pie de esa pirámide, donde se dispuso el escenario, iluminando la pirámide al entrar la noche.
El viaje presidencial sigue a Cancún este domingo y luego cambiará a helicóptero en Tulum para seguir el recorrido.
