La derrota y humillación de la Selección Mexicana de Futbol (3-0) a manos de Estados Unidos generó impotencia en la cancha, por ello fueron expulsados César Montes y Gerardo Arteaga, y después se trasladó a las tribunas.
Al minuto 89’ con el encuentro definido a favor de los estadounidenses, el público, en su mayoría mexicano en Las Vegas, comenzó a lanzar el ‘Ehhh, puto’, con lo que el árbitro detuvo las acciones y mandó a los jugadores al centro del campo como indica el protocolo en una primera advertencia.
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Pese a que se avisó desde el sonido local que el partido podía cancelarse y se pidió a la gente dejar de gritar en cada despeje o balón parado, la molestia de los espectadores era incontrolable.
Se agregaron 12 minutos que ya no se cumplieron, pues los mismos futbolistas de México, entre ellos Edson Álvarez, le pidieron al silbante que terminara el juego, cosa que sucedió.
Vergüenza en la cancha y en las gradas. Una vez más. El Tri quedó fuera de la Final de la Liga de Naciones de la Concacaf.
