Las selecciones de México y Argentina protagonizaron una fuerte pelea campal en el partido por la medalla de bronce del Mundial Sub-23 de softbol que se disputó en el país sudamericano.
Apenas en la primera entrada, mexicanos y argentinos vaciaron las bancas para comenzar une pelea campal que dejó como saldo ocho jugadores expulsados, cuatro de cada selección.
Sin embargo, había un antecedente de enfrentamientos en su partido de la primera ronda, cuando México derrotó a Argentina con una remontada.
Desde ese partido la tensión era palpable y, de acuerdo con reportes de la prensa local, la bronca del fin de semana era predecible. Aunque después de la pelea, Argentina cobró revancha al apalear 10-1 a México para ganar la medalla de bronce y subir al podio del Mundial Sub-23 de softbol.
“LOS APLASTAMOS”
“Llego a la base y el jugador de ellos se me tiró arriba del botín y lo rompió. Le fui a decir, junto con mi compañero, que se tirara bien y vino el entrenador de ellos (México) y empezó a pegar, ahí comenzó el disturbio”, explicó sobre la batalla el argentino Gian Scialocomo en palabras recogidas por Infobae.
“Jugamos más por los chicos expulsados y dimos lo mejor de nosotros para terminar aplastando a México, como lo veníamos pensando”, añadió.
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“Lo resolvimos bien y nos llevamos la medalla. Lo que pasó queda en la cancha y afuera somos todos amigos. Recuperamos nuestra esencia como equipo y terminamos en lo más alto”, subrayó Lucio Retamar.
