Por Tania Rosas
El gobierno de México compró el avión presidencial “José María Morelos y Pavón” en 218 millones de dólares y el presidente Andrés Manuel López Obrador lo vendió al gobierno de Tayikistán en 92 millones de dólares, 57.8% por debajo del precio de adquisición.
Felipe Calderón adquirió el lujoso avión Dreamliner 787-8, de la compañía Boeing, el 1 de noviembre de 2012, cinco años antes de que la aeronave con configuración VIP se ofreciera en el mercado. El contrato precisa que el avión costó 127.3 millones de dólares, pero en total se pagaron 218 millones al incluir el equipamiento.
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A lo que el gobierno pagó por el avión y su adecuación, deben sumarse gastos por el arrendamiento que elevan el costo a 338 millones de dólares.
La investigación de mercado que hizo la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS), que contiene antecedentes de la compra de 2012, además de información de Banobras a la que Latinus tuvo acceso, no hablan de ninguna falla de origen del avión presidencial, como este viernes lo señaló López Obrador al argumentar que es una de las razones por las que bajó el precio de la aeronave.
En 2019, la UNOPS dijo al gobierno federal que el avión podría venderse hasta
46% menos de su valor de lista, pero el porcentaje podría incrementar entre más
tardara la enajenación.
El gobierno de México ha desembolsado más recursos por un avión que sólo
utilizó el presidente Enrique Peña Nieto. Los costos fueron más allá de la compra
del bien. De acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación, en noviembre de
2012 se suscribió un contrato de arrendamiento financiero entre Banobras y la
Secretaría de Hacienda y la Secretaría de la Defensa Nacional.
El contrato fue “para la adquisición de un paquete integral de activos estratégicos
consistente en una aeronave de transporte estratégico para uso presidencial y del
Estado Mayor, así como apoyo terrestre, equipo de rampa, equipo de apoyo de
motor, repuestos, equipamiento de cabina y sistema de defensa por un monto total
de inversión de 6 mil 94 millones de pesos (338 millones de dólares con el tipo de
cambio actual), incluido el costo financiero del arrendamiento”.
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La Secretaría de la Defensa Nacional tiene que pagar a Banobras 451 millones de
pesos por el arrendamiento del avión correspondiente a 2023, unos 25 millones de
dólares al tipo de cambio actual. El mismo monto tendría que pagar cada año
hasta 2027.
