Entre reclamos de justicia y temor, migrantes permanecen en Ciudad Juárez tras incendio en estación del INM

migrantes-ciudad-juarez-miedo
Foto: EFE, Luis Torres

EFE.- A una semana del incendio en el que murieron 39 migrantes en una estación migratoria en Ciudad Juárez, el temor y el reclamo de justicia se mantiene entre los extranjeros varados en esta ciudad, fronteriza con Estados Unidos, porque persisten dudas sobre lo que pasó aquella noche.

Tras este caso, entre los migrantes, el principal temor es ser capturados por agentes del Instituto Nacional de Migración (INM), ya que en las instalaciones de este organismo ocurrió la tragedia.

Lee también: Sube a 40 la cifra de migrantes muertos por el incendio en Juárez y trasladan a seis heridos de gravedad a la CDMX

Por ello, decenas de migrantes se han refugiado en albergues, zonas no permitidas y hasta entre los muros de un edificio.

Sin recursos, muchos trabajan de lo que pueden, unos limpiando los parabrisas de los automóviles y lavando autos y otros vendiendo dulces.

Antes de la noche del 27 de marzo, cuando un incendio en un centro del INM en Ciudad Juárez, frontera norte de México, mató a 39 personas, si bien había incertidumbre entre los migrantes, también había esperanza.

Además de los fallecidos, el accidente dejó 28 heridos, de los que 24 permanecen hospitalizados y hasta ahora sólo cuatro fueron dados de alta. En la estación había casi 70 migrantes.

Recomendamos:“Es poco claro quién se encarga de la política migratoria en México”, lamenta especialista que presentó denuncia por la muerte de 39 migrantes

Uno de tantos migrantes que vive en el edificio es Joaquín Enríquez, procedente de Venezuela, quien contó a EFE que los recursos económicos se agotaron desde que llegaron a México hace unas semanas.

“Nos quedamos en este lugar porque no tenemos plata para comer ni para rentar una habitación. Nosotros le tenemos miedo a Migración, porque ellos siempre quieren mandar a uno para atrás (retornarlo a su país), si ahora fue un incendio, uno no sabe si para la otra será bomba”, dijo dudoso.

Otro de los habitantes de este lugar es su compatriota Demi Corso, quien asegura que en México la discriminación se intenta esconder, pero siempre sale a flote a la menor provocación.

“Aquí en México la xenofobia es dura, yo limpio los parabrisas de los coches y por intentar sobrevivir me querían matar. Un conductor me grito: ‘¡Por eso matan a los venezolanos!'”, expuso.

Comparte esta nota