La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) llamó este miércoles a realizar una investigación independiente encabezada por autoridades civiles del ataque a manos de militares que dejó cinco jóvenes muertas y un herido en Nuevo Laredo la madrugada del pasado 26 de febrero.
“La repetición de situaciones similares a partir del accionar de las fuerzas militares en Nuevo Laredo durante los últimos años hace más patente la necesidad de llevar a cabo un análisis objetivo y minucioso de las circunstancias en las que se hace uso de la fuerza”, informó el organismo mediante un comunicado
El lunes, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) aseguró que militares dispararon contra una camioneta la madrugada del pasado 26 de febrero tras un estruendo provocado por el choque de ese vehículo contra otro automóvil que estaba estacionado.
Afirmó que los pasajeros de la camioneta aceleraron la marcha cuando observaron a los militares, de manera “tempestiva y evasiva”.
Agregó que la camioneta viajaba a “exceso de velocidad, con las luces apagadas y sin placas”.
La ONU-DH también alertó a las autoridades mexicanas a que tome medidas con urgencia para la protección de los sobrevivientes, testigos, defensores de derechos humanos y periodistas relacionadas con el caso.
Y señaló que la investigación deberá cumplir con los estándares internacionales para determinar las responsabilidades.
“La ONU-DH expresa sus condolencias con las familias de las personas que perdieron la vida y reitera su reconocimiento a la importante labor de las personas defensoras de derechos humanos y periodistas que acompañan este caso”, añadió.
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Los seis jóvenes se dirigían a sus domicilios en una camioneta tipo pickup Chevrolet Silverado tras salir de un antro, cuando militares les habrían disparado en más de 20 ocasiones en el crucero de la avenida Huasteca y Méndez, aseguró el Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo.
