Responsable de Seguridad de la Cámara de Diputados sabía del ingreso de militares para los honores a la bandera desde mediados de enero

Foto: Cuartoscuro

Por José Gerardo Mejía

Graciela Báez Ricárdez, secretaria general de la Cámara de Diputados, fue informada desde el 11 de enero que la Banda de Guerra Monumental y “personal necesario” de la Secretaría de la Defensa Nacional ingresaría a las instalaciones de la Cámara de Diputados para llevar a cabo los honores a la bandera.

De acuerdo a oficios cuya copia tiene Latinus, en esa fecha, Héctor Castillo-Huertero Mendoza, secretario técnico del recinto legislativo de San Lázaro “solicitó autorización” a Báez Ricárdez “para que se pueda contar con la banda de guerra”, para la apertura de sesiones el primero de febrero.

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El oficio fue enviado con copia a Carlos Noriega Cano, director general de Resguardo y seguridad, además de Andrés Calderón, director general de Eventos del recinto legislativo.

De acuerdo a la página oficial de la Cámara de Diputados, la secretaría General tiene a su cargo la coordinación de los servicios parlamentarios, administrativos y financieros que garantizan que los apoyos para los órganos de gobierno, las sesiones y el trabajo de comisiones y comités se otorguen con imparcialidad y calidad, con apego al marco jurídico aplicable.

“Así como proponer y, en su caso, aprobar la normatividad, instrumentos y mecanismos administrativos que permitan el ejercicio eficiente, austero y transparente de los recursos de la Cámara, en beneficio de la actividad legislativa, así como de la preservación de la infraestructura del Palacio Legislativo de San Lázaro, considerado patrimonio nacional”, destaca la página.

Uno de los reclamos en los que coincidieron tanto legisladores de la 4T como de la oposición, es que el presidente de la Cámara de Diputados, Santiago Creel Miranda, no informó que el acto se llevaría a cabo en el vestíbulo y no en el salón de plenos.

Un día antes, el 10 de enero, Ricardo Villarreal García, presidente de la Comisión de la Defensa, solicitó “el ingreso de la Banda de Guerra Monumental, así como del personal necesario y llevar a cabo los honores a la bandera en las instalaciones” del recinto legislativo de San Lázaro.

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Posteriormente, Villarreal García se reunió el 19 y 31 de enero con autoridades de la Secretaría de la Defensa Nacional junto con Héctor Castillo-Huertero Mendoza y la Mesa Directiva de la Comisión de Defensa, es decir, el panista y diputados secretarios de la misma, de la Cámara de Diputados, en las instalaciones de San Lázaro.

En entrevista con Latinus, Villarreal García aclaró que “participamos en los encuentros como Comisión, la presidencia y los secretarios, pero debo subrayar que quien acuerda el protocolo final es el diputado Santiago Creel, como presidente de la Cámara de Diputados”.

“En muchas ocasiones esto se ha llevado a cabo siempre con un protocolo acordado con la Sedena, incluso, la vez anterior, el primero de septiembre, “la escolta de la Sedena no entró al pleno, porque fue sustituida por Protección Civil de la Cámara de Diputados”.

“En el caso de la escolta de la Sedena, nos han explicado que de acuerdo a sus lineamientos, el arma es parte de su uniforme y pues eso lo hemos visto en otras expresiones de las fuerzas armadas, como son los desfiles”, recordó.

Villarreal García, legislador del PAN, adelantó que los grupos parlamentarios en la Cámara de Diputados discuten modificaciones al reglamento interior para que los militares entren armados al salón de sesiones, pero sin municiones.

“Hay ya conversaciones principalmente entre coordinadores de los grupos parlamentarios para llevar a cabo modificaciones al reglamento interno de la Cámara de Diputados y en ese punto se plantea que los militares entren al salón de sesiones con armas, sí, pero sin municiones”, explicó.

Consideró que el choque que hubo entre Santiago Creel, presidente del recinto legislativo de San Lázaro, y legisladores de la 4T, principalmente obedeció más a una confusión que a una equivocación.

Actualmente, el artículo 25 reglamento de la Cámara de Diputados establece que en el Recinto estará estrictamente prohibida la entrada a toda persona armada.

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La Sedena confirmó este jueves a través de un comunicado que la “intervención del personal participante en el mencionado acto protocolario, se efectuó con base en una coordinación previa con representantes del área de Protocolo de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, en la que se determinó como lugar del evento el vestíbulo del recinto legislativo”.

“Cabe precisar que, la Bandera de Guerra de las Unidades del Ejército y Fuerza Aérea Mexicanos, es custodiada permanentemente por personal militar armado, como símbolo máximo de respeto e identidad nacional”, indica la Sedena.

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