Por José Gerardo Mejía
Con música de mariachi en vivo y “El Carnalito”, peluche miniatura, similar a la figura presidencial, el canciller Marcelo Ebrard fue recibido por diputados de Morena que apoyan sus aspiraciones a la presidencia.
Cuando el titular de la Secretaría de Relaciones Exteriores arribó a la plenaria de Morena, ya llevaba en la bolsa el apoyo de 17 de los 41 legisladores del PVEM, con Javier López Casarín y Juan Carlos Natale como los operadores más visibles.
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El mariachi Real de Jalisco, que contrató el diputado de Morena, Emmanuel Reyes, alcanzó a repetir “El Rey”, canción del compositor José Alfredo Jiménez, y la melodía compuesta que repite Con Marcelo sí vamos a avanzar… el que trae propuesta… con Marcelo sí.
Cooperacha de a 200 pesos entre 30 diputados, entre ellos Karla Almazán, Manuel Valdenebro, Ángel Domínguez, conocido como “El Andariego”, Carmen Bautista, Carol Altamirano, Miguel Prado de los Santos, del estado de Chiapas, entre otros.
En esas estaban, cuando personal de resguardo de la Cámara de Diputados exigió que desalojaran el recinto legislativo de San Lázaro.
Ante la exigencia, intervino la diputada Inés Parra, quien regañó a los mariachis, porque ellos pagaron por una hora de música, sin embargo, cuando se metió con la cargada a escuchar el mensaje del canciller, los acompañaron a la calle.
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—Canciller, ¿se siente fuerte, confiado en sus aspiraciones a la candidatura de Morena?, preguntó un reportero.
—Tenemos muchas amigas y amigos en el interior del grupo parlamentario, diputadas, diputados; nos va muy bien, respondió un sonriente Ebrard, a quien sólo faltó que lo metieran en hombros a la plenaria de Morena.
Adentro, el canciller dio datos duros de su trabajo en la SRE, uno de los que más llamó la atención de los diputados de Morena, fue cuando comentó que en la detención de Ovidio Guzmán, en la habitación donde se encontraba había 47 armas de alto calibre.
“¿De dónde vienen esas armas?”, preguntó como parte de su cruzada contra el tráfico de armamento en el norte del país. “Vienen de Estados Unidos”, respondió.
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Como sinónimo del resto de los aspirantes, Ebrard mencionó que ha estado cerca del presidente Andrés Manuel López Obrador los últimos 25 años, los mismos que dijo el senador de Morena, Ricardo Monreal. Allí hay un empate.
Casa llena en El Salón Aurora, mismo escenario que hubo con el secretario de Gobernación, Adán Augusto López, quien no llevó porra, pero legisladores como el coahuilense, Francisco Javier Borrego confiaron que dieron su apoyo al tabasqueño.
Cuando Sheinbaum se presentó ante los diputados de Morena, tuvo el aplauso de las primeras filas, entre las que se encontraba la también empresaria, Patricia Armendáriz, una de las que pagó los espectaculares “Es Claudia”.
Sheinbaum respondió en dos rondas de preguntas y con habilidad sorteó comentarios de diputados en contra de gobiernos morenistas como el sinaloense, Guadalupe Torres, y el michoacano, Carlos Manzo.
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Ante sus críticas y reclamos, la funcionaria capitalina recordó que hay instancias en su partido para desahogarlos y por el contrario enfatizó: “Aquí estamos todos juntos, porque la crítica que nos hacen es al proyecto, no a la persona”.
La jefa de Gobierno pidió no dejar solo al Ejecutivo federal, porque la 4T es un proyecto.
El diputado Gerardo Fernández Noroña, quien pidió ser incluido en la pasarela de aspirantes, exigió revisar la metodología para aplicar la encuesta, con un equipo acordado entre Morena, PVEM y Partido del Trabajo.
Antes de salir de la reunión plenaria de esa bancada, Fernández Noroña repitió su advertencia: “se burlan, pero de carpita en carpita, me los voy a chingar”.
