Reuters.- El gobierno del presidente Joe Biden planea enviar una delegación oficial a La Habana este mes para reiniciar las conversaciones entre Estados Unidos y Cuba sobre implementación de leyes que fueron suspendidas durante la administración de Donald Trump, dijo este jueves el Departamento de Estado.
La preocupación de Estados Unidos sobre el antiterrorismo estará entre los temas que se discutirán, dijo un portavoz del Departamento de Estado.
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Trump colocó a Cuba en la lista estadounidense de patrocinadores del terrorismo poco antes de que terminara su mandato y la administración de Biden ha estado revisando la disposición desde que asumió el cargo.
La reunión será la primera de su tipo desde que el diálogo sobre la aplicación de ley, que comenzó en 2015 durante el mandato del expresidente Barack Obama y que se detuvo en 2018 bajo Trump, quien revirtió la relación de su predecesor demócrata con Cuba.
La delegación estadounidense estaría integrada por representantes del Departamento de Estado, de Seguridad Nacional y Justicia y el Buró Federal de Investigaciones (FBI, en inglés).
Biden ha comenzado a cambiar algunas de las duras políticas de Trump, pero ha mantenido otras, insistiendo en que el gobierno cubano debe mejorar su historial de derechos humanos.
“Este tipo de diálogo mejora la seguridad nacional de Estados Unidos a través de una mejor coordinación internacional de las fuerzas del orden, lo que permite proteger mejor a los ciudadanos estadounidenses y llevar ante la justicia a los delincuentes transnacionales”, dijo el portavoz del Departamento de Estado en un comunicado.
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Sin embargo, el funcionario agregó que “este diálogo no afecta el enfoque continuo de la administración en temas críticos de derechos humanos en Cuba”.
En Washington, una fuente familiarizada con el asunto dijo que se esperaba que las conversaciones se lleven a cabo la próxima semana. El gobierno cubano no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios.
Entre los temas que se esperan que sean tratados están los esfuerzos contra el cibercrimen, las amenazas terroristas y el narcotráfico, según la fuente familiarizada con el asunto.
La Habana ha calificado su inclusión en la lista estadounidense como una “calumnia” y un falso pretexto para seguir castigando económicamente a la nación.
