La Fiscalía General de la República (FGR) informó que un juez federal dictó una sentencia de 312 años de prisión en contra de Jhoan García Márquez, alias “El Chino”, integrante de la organización delictiva Los Caballeros Templarios.
“El Chino” fue sentenciado por los delitos de delincuencia organizada (hipótesis de secuestro, sin funciones de dirección), privación ilegal de la libertad en la modalidad de secuestro en agravio de 12 víctimas y posesión de cartuchos para armas de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea.
Puedes leer: “El Tucán”, jefe de plaza de Los Caballeros Templarios, niega ser el autor del atentado contra Ciro Gómez Leyva
Además, el juez le impuso una multa de un millón 489 mil 999 pesos.
En diciembre de 2013, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) detuvieron a Jhoan García junto con otros hombres mientras portaban armas largas, en el municipio de Apatzingán, Michoacán, de acuerdo con la FGR.
El pasado 9 de diciembre, la FGR informó que obtuvo una sentencia condenatoria por 47 años en contra de Servando Gómez Martínez, alias “La Tuta”, por delitos de delincuencia organizada y contra la salud.
Las autoridades señalaron que se logró probar que Servando Gómez, entre otros, eran líderes de Los Caballeros Templarios, “con funciones de dirección y administración, teniendo como principal actividad el tráfico de drogas en diversos estados del país, principalmente en Michoacán”.
En marzo de 2015, “La Tuta” fue detenido y permanece recluido en el Centro Federal de Readaptación Social Número 1 “Altiplano”, con sede en Almoloya de Juárez, Estado de México.
Recomendamos: Sentencian a 47 años de prisión por delincuencia organizada a “La Tuta”, líder de los Caballeros Templarios
En el año de 2015, el gobierno de México informó que Servando Gómez –considerado hasta ese momento como el criminal más buscado del país– fue detenido como parte de la estrategia implementada a través de la Comisión para la Seguridad y el Desarrollo Integral en el estado de Michoacán.
En ese estado operan principalmente los cárteles Jalisco Nueva Generación (CJNG), La Nueva Familia Michoacana y Los Caballeros Templarios, así como otras seis organizaciones regionales que mantienen nexos con estos grupos delictivos.
