El subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía, explicó este jueves paso a paso los juzgados por los que pasaron las acusaciones contra el Ramón “N”, alias “El Moncho” o “R1” y señaló que los jueces siguieron una “trayectoria de impunidad” que terminó en su liberación.
Comenzó con la resolución de liberar a Ramón “N”, perteneciente al Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG), que fue ordenada de la jueza primera de Distrito de Procesos Penales Federales de Jalisco.
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En conferencia de prensa matutina dio a conocer que la madrugada del sábado se decretó la libertad de Ramón “N” a quien se le acusa de delincuencia organizada y delitos contra la salud en la causa penal 426/2012-I, antes 239/2012-IV.
Ricardo Mejía explicó que la jueza primera de Distrito de Procesos Penales Federales de Jalisco ordenó poner en libertad al detenido: “la jueza emitió la sentencia absolutoria y el juez segundo de Distrito en el estado de Sonora fue exhortado a dar cumplimiento a esta sentencia y se envió el escrito al centro de reclusión federal en Hermosillo, Sonora”.
Ramón “N” se encontraba recluido y contaba con cinco expedientes con sus antecedentes penales y con mandamientos judiciales por delitos como secuestro y delincuencia organizada.
Ricardo Mejía dio a conocer que pese a los delitos de los que se le acusaba, hubo una serie de eventos que llevaron a que el detenido fuera puesto en libertad, los cuales compartió en una lámina con el título “trayectoria de impunidad”.
Primero, en el Juzgado Séptimo de lo Criminal del Primer Partido Judicial en Jalisco decretó auto de libertad argumentando falta de elementos para procesar. Las acusaciones eran por delincuencia organizada y secuestro y se encontraban en la causa penal 185/2012-B.
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Después, el Juzgado Tercero absolvió a “El Moncho” del delito de delincuencia organizada, presentado en la causa penal 211/2021-IV BIS, y ordenó su inmediata libertad.
El Juzgado Quinto del Primer Partido Judicial de Jalisco también ordenó su libertad debido a un fallo del juez segundo de Primera Instancia de lo Penal del Distrito Judicial de Hermosillo, quien determinó que había falta de elementos para procesarlo por los delitos de secuestro y delincuencia organizada contenidos en la causa penal 522/2012.
Posteriormente, indicó que el Juzgado Quinto del Primer Partido Judicial de Jalisco también ordenó la inmediata libertad por falta de elementos para procesarlo por secuestro y delincuencia organizada, con lo que finalizó la causa penal 542/2012.
