El Congreso de Nuevo León aprobó este miércoles la reformas a diversos artículos de la Ley de Participación Ciudadana, con las cuales el gobernador Samuel García Sepúlveda podrá ser sometido a una consulta de revocación de mandato en el 2025 para definir si sigue en el cargo o dimite por falta de confianza.
Durante la discusión del dictamen —que fue aprobado en lo general por 30 votos a favor, 11 en contra y cero abstenciones—, la bancada de Movimiento Ciudadano argumentó que el proyecto se le asignó “de manera sospechosa” al Partido Acción Nacional (PAN), que impulsó la reforma desde la Comisión de Legislación.
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“Estoy a favor de que haya revocación de mandato, este asunto lo estuvimos viendo en la Comisión de Legislación, y desde ese momento manifestamos que la iniciativa había sido erróneamente turnada, la Comisión pertinente es la Comisión de Gobernación y de Organización de los Poderes, ellos eran los competentes”, dijo Irais Reyes, de la bancada del MC.
La congresista reprochó que en el Congreso local hay mucha inmediatez para aprobar las reformas que tiene que ver con la revocación del mandatario, pero no hacen lo mismo para limitar la permanencia de los legisladores y los legisladores en el estado.
“No ponemos el mismo empeño en restringirnos a nosotros como diputados y también para facilitar el proceso para que la ciudadanía quite a sus diputados y a sus alcaldes”, dijo la legisladora del MC.
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Por su parte, la diputada Tabita Ortiz, de MC, dijo que “a pesar de llenarse la boca de palabras de los ciudadanos, consuman hoy un acto guiado por el revanchismo y no porque buscan la participación ciudadana”.
