Reuters.- Desde comparaciones con una “telenovela basura” hasta “una sólida pieza de televisión de prestigio”, la quinta temporada del exitoso drama “The Crown” ha dividido a los críticos.
El galardonado programa de Netflix, centrado en el reinado de la difunta reina Isabel II, ha suscitado controversia por sus diálogos e historias ficticias. Los nuevos episodios abordan un período difícil para la familia real británica que muchos comentaristas consideran inapropiado por el poco tiempo que lleva muerta la monarca.
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El elenco, encabezado por Imelda Staunton como Isabel, muestra a la realeza en la década de 1990, cuando enfrentó problemas matrimoniales, disidencia pública y un incendio en el Castillo de Windsor, la casa de la reina cerca de Londres.
La nueva temporada se estrena el miércoles, dos meses después de que Isabel muriera a los 96 años y su hijo mayor, Carlos, se convirtiera en rey.
“La quinta temporada de The Crown ahora llega como la primera que se muestra desde la muerte de su protagonista, y el programa en sí se siente como si su hora hubiera pasado”, dijo el periódico británico The Guardian. “Estos nuevos episodios son, a menudo, simplemente aburridos”.
Entre las principales historias de esta temporada se encuentra el amargo divorcio entre Carlos y la difunta princesa Diana.
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Varias personas, incluida la actriz Judi Dench, han pedido a Netflix que se excuse de responsabilidades al comienzo de cada episodio. Netflix simplemente describe “The Crown” como una “dramatización ficticia” inspirada en hechos reales.
“A pesar de las miles de palabras indignadas que se han escrito acusándolas de convertir a la familia real en una telenovela barata (…) los primeros tres episodios son aburridos. Pero aquí están las buenas noticias. Se pone mejor. Mucho mejor”, escribió The Times.
