El secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard Casaubón, aseguró este jueves que el esfuerzo que Estados Unidos debe hacer para frenar el tráfico ilegal de armas a México es menor al que el gobierno federal hace para frenar el tráfico de precursores químicos y drogas, como el fentanilo.
Durante su presentación en la conferencia “El negocio de la letalidad: el tráfico de armas a México”, organizado por el Colegio de México, el canciller aseguró que se debe frenar el ingreso de armas para frenar el círculo de violencia que afecta a ambos países.
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Ebrard aclaró que para el país es de suma importancia acabar con el tráfico de armas para frenar la violencia provocada por el crimen organizado, ya que en la estrategia de seguridad binacional el quid pro quo entre ambas naciones debe ser proporcional.
“La (estrategia) más obvia es que haya un esfuerzo proporcional en Estados Unidos (para frenar el flujo de armas) al que se hace en México para frenar el tráfico de estupefacientes”, dijo.
El canciller dijo que el interés primordial del gobierno del presidente Biden es frenar el tráfico de precursores químicos, que pasan por nuestro país, para la fabricación de fentanilo, mientras que a México le preocupa que se detenga el ingreso ilegal de armas que terminan en manos del crimen organizado y generan un incremento en la violencia.
Tras realizar una revisión de los datos y rastrear las armas incautadas en el país al crimen organizado, el canciller indicó que se ha identificado a los principales vendedores en Estados Unidos, así como los lugares en lo que se encuentran.
“El esfuerzo que tiene que hacer Estados Unidos para frenar drásticamente el flujo a México es muy pequeño respecto al esfuerzo que México tiene que hacer para controlar los precursores químicos y las drogas que llegan a EU, hay una desproporción de esfuerzos”, dijo.
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“No les estamos pidiendo que hagan una operación gigante, difícil, compleja, casi imposible, ahí están los lugares”, indicó el canciller, que recordó que los reportes con los condados y puntos de venda detectados fue entregado en el Diálogo de Alto Nivel sobre Seguridad realizado en Washington a mediados de octubre.
Destacó que entre enero de 2020 a septiembre de 2022 se han incautado al crimen 55 mil 996 armas que ingresaron de forma ilegal al país y señaló en el mismo periodo, el Departamento de Seguridad Nacional de EU incautó cerca de 300 armas.
Aseguró que las armas traficadas se han extendido por todo el país salvo en los estados de Yucatán y Oaxaca y las zonas serranas de los estados del norte. Un caso particular de Oaxaca es la región del istmo de Tehuantepec, donde sí se han localizado armas ilegales.
“Nuestro país tiene una pandemia de armas con diferentes grados de intensidad, estas son las que se aseguraron, pero pude decid que hay un número mayor. Si no reducimos la disponibilidad de armas, va a ser difícil reducir la violencia, es un objetivo prioritario”, dijo.
