Bolsonaro rompe el silencio: evita reconocer su derrota electoral y acusa injusticias en el proceso, pero accede a iniciar la transición con Lula

Foto: Reuters

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, se pronunció dos días después de los resultados de los comicios presidenciales sin reconocer la victoria de Luiz Inácio Lula da Silva, pero acusando injusticias en el proceso electoral del pasado domingo.

Tras su breve mensaje, su jefe de gabinete dijo que Bolsonaro le autorizó iniciar el proceso de transición con Lula.

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Bolsonaro dijo que siempre se ha conducido dentro de los límites de la Constitución y aseguró que las protestas de camioneros que bloquean vías en Brasil son el resultado de la indignación por las injusticias del proceso electoral.

“Los movimientos populares son fruto de indignación y sentimiento de injusticia de cómo se dio el proceso electoral”, afirmó el líder ultraderechista en su primera manifestación desde que perdió los comicios.

El actual presidente dijo también que las manifestaciones no pueden replicar la misma fórmula que la de la izquierda, la cual busca invadir la propiedad y destruir el patrimonio.

@latinus_us Hay indignación por cómo se desarrolló el proceso electoral: Jair Bolsonaro evita reconocer su derrota e inicia la transición con Lula. #Latinus ♬ sonido original – Latinus

Bolsonaro agradeció a los 58 millones de electores que votaron por él el pasado domingo y expresó el “honor” que significa “ser el líder” de esas personas que, como él, defienden los valores conservadores que están impresos en su lema: “Dios, Patria y Familia”.

“La derecha surgió de verdad en este país”, declaró arropado por ministros y parlamentarios de su base aliada.

Lula da Silva, de 77 años y candidato de un frente progresista, se impuso con un muy ajustado 50.9% en la segunda vuelta de las elecciones, en tanto que Jair Bolsonaro recibió el apoyo del 49.1%, que augura una feroz oposición para el presidente electo a partir del 1 de enero, cuando asumirá el cargo.

Por primera vez, al menos desde que en 1996 se adoptó la reelección por sólo un período consecutivo en Brasil, un gobernante en ejercicio del poder fracasa en su intento de mantenerlo.

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Hace cuatro años, Bolsonaro, llevó al poder a la ultraderecha brasileña a través del voto, por primera vez.

Tras llegar al poder en 2018, con escasa capacidad de diálogo, Bolsonaro vio cómo partidos de centro y centroderecha que le habían apoyado se alejaban y se arropó sobre todo con pastores evangélicos, policías y militares, que pasaron a ocupar buena parte de la estructura del Ejecutivo.

La popularidad con que había asumido el gobierno, cercana al 50% en enero de 2019, comenzó a esfumarse durante su primer año de gestión, en el que apostó en el conflicto permanente que agrada a los más radicales de sus seguidores.

Con Bolsonaro, de 67 años, pierde también la ultraderecha global, que había apoyado al capitán de la reserva del Ejército en unas elecciones que, según el estadounidense Steve Bannon, eran las “más importantes, intensas y dramáticas del siglo XXI” para ese movimiento.

Con información de EFE.

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