EFE.- Alertado por estar dos veces en desventaja ante Troyes, Lionel Messi recurrió a su magia y el talento que ha mostrado a lo largo de su carrera para desperezar al París Saint-Germain (PSG) y encabezar la voltereta auxiliado por Neymar y Mbappé, para ganar 4-3 en el compromiso de la decimotercera jornada de la Ligue 1 francesa que domina con solvencia.
No se dejó sorprender el PSG ante un rival habitualmente sometido a la presión del descenso y este año aliviado gracias a marcadores aseados en el ecuador de la tabla por ahora. Dio buena sensación el Troyes, que afrontó el compromiso sin complejos y que hizo todo por salir con algún premio del Parque de los Príncipes. Lo intentó hasta el final.
El PSG, que nunca ha perdido en su campo con el Troyes en la Ligue 1, afrontó con cierto relax la vuelta a la liga después de sellar su clasificación para los octavos de la Champions Legue. Apuntaba bien la visita del equipo de Irles que no ha logrado ganar en sus últimos cuatro partidos.
PROBLEMAS
Pero el choque se enquistó casi desde el arranque para el PSG porque en un contraataque, un centro desde la izquierda de Abdu Conte no lo pudo aprovechar Rony Lopes que vio la llegada del guineano Mama Balde para batir a Gianluigi Donnarumma.
Iba en serio el Troyes. Pero el PSG jugó con el marcador. Reaccionó aunque a medio gas y sin inquietar en exceso a los visitantes. Bastó un pase al espacio de Neymar hacia Carlos Soler para que el español, dentro del área, batiera a Gauthier Gallon y estableciera el empate. El portero del Troyes, al borde del descanso, frenó al campeón al detener un cabezazo de Messi.
También puedes leer…
‘Dibu’ Martínez, portero titular de Argentina, sufre golpe en la cabeza y deja la cancha con mareos
No se asustó el Troyes, que volvió a tomar ventaja al inicio de la segunda parte, en el 52. Otra vez Mama Balde. Dejó en evidencia a la zaga parisina. Especialmente a Presnel Kimpembe. El guineano recibió un centro de Wilson Odobert. paró el balón, se dio la vuelta sin oposición, y marcó.
MAGIA
Fue entonces cuando Messi tiró de su magia. Tres minutos duró la ventaja visitante. El astro argentino recibió un balón de Sergio Ramos y desde fuera del área ejecutó un tiro imposible para Gallon.
El PSG logró la voltereta a la hora de juego, cuando Messi filtró una pelota a Neymar que se coló entre los centrales del Troyes y no falló. Envió la bola a la red y puso por delante al PSG que parecieron sentenciar a diez del final, con una falta dentro del área de Gauthier Gallon sobre Kylian Mbappé. El francés ejecutó desde los once metros. No falló. No faltó a la fiesta de la tripleta ofensiva del campeón.
Aún así no se rindió el Troyes que se metió otra vez en el partido con el gol del croata Ante Palaversa a pase de Renaud Ripart. Le faltó tiempo y acierto al equipo de Irles y le bastó al PSG para acentuar su liderato.
