Qatar convocó el viernes al embajador alemán por las declaraciones de la ministra del Interior de Alemania, Nancy Faeser, quien criticó la decisión de otorgar la sede del Mundial a la nación del Golfo Pérsico debido a su negativo historial de derechos humanos.
Es la primera vez que Qatar convoca a un embajador luego de años de intenso escrutinio internacional sobre su trato a los trabajadores migrantes y la criminalización de las relaciones homosexuales, y se produce cuando las autoridades parecen cada vez más hartas de tales críticas.
Qatar, cuya riqueza en gas lo convierte en uno de los países más ricos del mundo, será la primera nación árabe o musulmana en albergar el Mundial de Futbol, el evento deportivo más grande del mundo.
Se espera que más de 1.2 millones de fanáticos desciendan a la pequeña nación desértica para el torneo de un mes de duración que comienza el 20 de noviembre.
CRÍTICA
La ministra del Interior de Alemania, Nancy Faeser, quien también es responsable de los deportes, planea viajar a Qatar, sede del Mundial, el lunes y el martes con el comisionado de derechos humanos del gobierno, los legisladores alemanes y una delegación de la federación alemana de futbol.
Su ministerio dijo que la visita se centraría en cuestiones de derechos humanos relacionadas con el torneo; incluye la protección de las personas LGBTQ contra la discriminación y la persecución, y la responsabilidad de los trabajadores migrantes que construyeron los estadios.
En comentarios publicados el jueves por la emisora alemana ARD, Faeser dijo que el gobierno alemán está convencido de que la adjudicación de grandes eventos deportivos debe estar vinculada a la observancia de los derechos humanos y la sostenibilidad.
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Consultada sobre dar la seded el Mundial a Qatar, dijo que “hay criterios que deben cumplirse, y entonces sería mejor no otorgar a esos estados”.
En un comunicado oficial emitido el viernes, Faeser señaló que “ninguna Copa del Mundo se lleva a cabo en el vacío”. Agregó que con respecto a los futuros eventos deportivos internacionales, “debemos asegurarnos de que su adjudicación organización esté ligada a los estándares de derechos humanos”.
CONDENA
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Qatar dijo que convocó al embajador para transmitir su “decepción y rechazo y condena total” de los comentarios de Faeser. No especificó si se refería a los comentarios de ARD o a su declaración oficial.
En un discurso televisado a principios de esta semana, el emir gobernante de Qatar, el jeque Tamim bin Hamad Al Thani, dijo que su país “ha sido objeto de una campaña sin precedentes que ningún país anfitrión ha enfrentado”, una que ha incluido “fabricaciones y dobles raseros”.
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Qatar dijo que gran parte de las críticas por su trato a trabajadores migrantes ignora las reformas promulgadas en los últimos años; incluso han sido elogiadas por la ONU y por los principales grupos de derechos humanos. Esos grupos han dicho, sin embargo, que ha faltado implementación y que se necesita hacer más para abordar los abusos generalizados; incluido el robo de salarios y las duras condiciones de trabajo.
La ley de Qatar castiga la actividad homosexual con 1-3 años de prisión. Las autoridades han dicho que los fanáticos LGBTQ pueden asistir al torneo. E instaron a todos los visitantes a respetar la cultura conservadora del país.
Varios equipos europeos pidieron permiso a la FIFA para que sus capitanes usen brazaletes de arcoíris como parte de la campaña “One Love”.
Las federaciones también expresaron su apoyo a una campaña para establecer un fondo de compensación para los trabajadores perjudicados durante la construcción de estadios e infraestructura en expansión durante los 12 años desde que Qatar recibió la Copa del Mundo.
Con información de AP
