Por José Gerardo Mejía
En un hecho inédito en la Cámara de Diputados, las Fuerzas Armadas se convirtieron en un grupo telonero que abrió de manera previa a la llegada del secretario de Gobernación, Adán Augusto López, para entregar el cuarto informe de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador como acto principal.
El funcionario federal cumplió con la obligación constitucional con más de dos horas de retraso, ¿la razón?, tanto él como los legisladores de la 4T dieron prioridad a escuchar a la distancia el mensaje del presidente Andrés Manuel López Obrador en Palacio Nacional que inició a la misma hora.
Luego de pasar lista, la mayoría de los diputados de Morena, PT y PVEM se atrincheraron con sus respectivos coordinadores para seguir el acto del Ejecutivo federal, quien paralizó el inicio de la sesión hasta que dejó de escucharse el último aplauso, el último grito de apoyo, la última arenga.
En tanto, en el salón de sesiones, senadores y diputados de la oposición intercambiaron anécdotas que se agotaron entre curules mientras de manera virtual López Obrador controlaba el reloj legislativo de manera remota, en medio del complaciente silencio.
Para hacer más llevadera la espera, la banda de guerra del Ejército mexicano y Fuerza Aérea ocupó el área —asignada en otro tiempo a los cabilderos— frente al llamado “corral”, donde se encuentran los reporteros, para tocar diversas canciones y melodías.
Rancheras, cumbias, pasos dobles, un huapango, y otras más para despertar el sentimiento de los presentes, como Qué te ha dado esa mujer, que inmortalizó Pedro Infante, fueron parte del repertorio militar. Sólo faltó el animador o maestro de ceremonias.
La banda de guerra también incluyó la hora de las complacencias con peticiones del senador Armando Guadiana y el diputado, Francisco Javier Borrego, además de las selfies que solicitaron legisladores con los uniformados.
La canción Así fue, del cantautor Juan Gabriel fue la que cerró la actuación de los militares, ya que a las 18:48 horas entró al recinto el secretario de Gobernación escoltado por una comitiva de legisladores. Los militares se retiraron en segundos, como si hubieran concluido un operativo en la sierra.
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Como si se tratara de quien ya ganó las elecciones presidenciales, legisladores de la mayoría de los grupos parlamentarios hicieron valla a lo largo del pasillo central para abrazarlo, felicitarlo, besarlo, darla la mano, palmadas y palabras de aliento.
“¡Déjenlo pasar!”, gritó el diputado de Morena, Francisco Javier Borrego, pero nadie le hizo caso, por el contrario, hasta Ignacio Mier Velazco, su coordinador y nuevo presidente de la Junta de Coordinación Política, alentó hasta a los de la oposición a acercarse con Adán Augusto López.
“El secretario quiere saludarlos”, dijo Mier Velazco al acercarse con el presidente del PRI y también diputado, Alejandro Moreno y Humberto Moreira, a quien releva en la Jucopo.
“Sólo lo saludé”, confirmó el secretario de Gobernación cuando pudo retirarse del salón de sesiones para dar una conferencia de prensa posterior.
Los priistas se colocaron de pie a un lado de las curules como cuando los fieles quieren recibir el agua bendita que arroja el cura en la iglesia, y se movieron luego de estrechar la mano del representante de la política interior, de ese gobierno que tiene marca personal sobre Alejandro Moreno.
En un recorrido que consta de 75 pasos, el secretario de Gobernación se convirtió en el centro de un remolino de legisladores que provocó un retraso de 28 minutos más, cuando caminó en cámara lenta de la puerta central al micrófono, que en condiciones normales tarda minuto y medio.
“El Ejecutivo no enviará iniciativa preferente en este periodo”, aclaró cuando por fin pudo tomar el micrófono de la tribuna, luego de otros tres minutos, tiempo que ocupó en saludar a los integrantes de la Mesa Directiva, integrada por 10 mujeres legisladoras y el panista Santiago Creel, presidente de la misma.
Los legisladores de la 4T se presentaron en el salón de plenos una hora después con banderas tricolores y arengas a favor del tabasqueño, como si hubieran asistido a Palacio Nacional.
Un total de 94 senadores y 476 diputados atestiguaron la entrega del cuarto informe presidencial, para posteriormente dar paso a los posicionamientos que iniciaron con una intervención atropellada de la senadora del PES, Sasil de León, a quien Morena le dio tres minutos de los siete que tenía cada grupo parlamentario en tribuna.
En tribuna, el diputado Leonel Godoy archivó el discurso de la confrontación para afirmar que Morena quiere construir acuerdos: “Tenemos una propuesta que vamos a presentar en una ruta legislativa”.
“El paquete económico, preponderantemente el Presupuesto de Egresos de la Federación del 2023, la reforma a leyes para que la Guardia Nacional pase a formar parte de la Secretaría de la Defensa Nacional, que no es militarizar a la Guardia Nacional. Sedena no es el Ejército nacional, Sedena es una institución de la administración pública federal”, apuntó.
Aunque Godoy cerró con la mayor de las preocupaciones de la 4T al subrayar que “no queremos un árbitro que esté cargado para un lado. Nosotros, estamos dispuestos por ese motivo a encontrar acuerdos”, ofreció.
En su turno, el coordinador del PAN en el Senado, Julen Rementería, pidió hacer un alto en el camino para iniciar desde hoy “abrazando a las víctimas y no a los delincuentes”.
“Digamos, todas y todos, no a la transferencia de la Guardia Nacional. Aprobamos su creación civil, con un mando civil, que así siga”, expresó el panista, seguido de las voces de la oposición que enfatizaron el fracaso en materia de seguridad.
Antes de que el secretario de Gobernación saliera del salón de sesiones, el senador del Grupo Plural, Emilio Álvarez Icaza, reclamó a gritos el retraso para llevar a cabo la sesión, por lo que los legisladores de la 4T le respondieron desde el anonimato: “¡Cállate payaso!”, “¡Ridículo!”.
En tanto que Adán Augusto López se enfiló al estacionamiento luego de dar una conferencia de prensa, acompañado de los diputados de Morena, Carlos Manzo y el líder del PT, Alberto Anaya, quien lo siguió hasta su vehículo a pesar de que se despidió de él al menos en tres ocasiones.
En el recinto, varios diputados subían a sus redes la intervención musical de los militares, a unas horas de que Morena y sus aliados, con su mayoría de cincuenta más uno, aprueben la iniciativa presidencial que anexará la Guardia Nacional a la Sedena.
