EFE.- El italiano Lamont Marcel Jacobs, único europeo en la semifinal del reciente Mundial de Eugene, se convirtió este martes en el nuevo rey de la velocidad continental junto con la alemana Gina Lückenkemper, que voló sobre la pista del Estadio Olímpico de Munich para imponerse en los 100 metros lisos.
Lückenkemper, de 25 años, fue subcampeona en el Europeo de Berlín de 2018. Cuatro años después, con un estadio entregado, voló para parar el cronómetro en 10.99, su mejor marca de la temporada. Segunda fue la suiza Mujinga Kambundji y tercera la británica Daryll Neita.
No pudo pelear por las medallas la también británica Dina Asher-Smith, que se lesionó durante la carrera, circunstancia que la impidió revalidar la corona que logró hace cuatro años en los 100 metros, junto con el 200 y el relevo 4×100.
En la categoría masculina. Jacobs completó una carrera perfecta. Con un tiempo de reacción de 0.153, paró el crono en 9:95, cuatro centésimas menos que el británico Zharnel Hugues, segundo, y su compatriota, Jeremiah Azu, tercero con 10:13.
Con esta medalla, el italiano vuelve a escribir su nombre con letras de oro en el libro del atletismo internacional. En 2021 ya puso fin en Tokio a veinticinco años de dominio mundial de velocistas del continente americano, convirtiéndose en el primer campeón olímpico europeo desde el británico Linford Christie en Barcelona’92.
Lamont Marcell Jacobs nació el 26 de septiembre de 1994 en la ciudad fronteriza de El Paso, en el estado de Texas, de madre italiana y padre estadounidense.
Jacobs, admirador de los atletas Carl Lewis y Andrew Howe, forma parte del olimpo de los mejores velocistas de la historia.
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