Guadalajara empató 1-1 este sábado por la noche ante el Atlas en una edición más del Clásico tapatío, correspondiente a la Jornada 8 del Apertura 2022 de la Liga MX, disputado en el Estadio Akron. De paso, los rojiblancos suman 10 juegos sin ganar (ocho de Liga, más derrotas contra Juventus en amistoso y en la Leagues Cup ante el Galaxy).
Las Chivas iniciaron ‘bien’, pues apenas al primer minuto habían anotado su primer gol como locales en el torneo con un tiro de Isaac Brizuela ante Camilo Vargas, aunque segundos después la acción fue invalidada por offside del ‘Conejito’.
El partido se le puso de cara a los rojiblancos al 10′ luego de una polémica expulsión de Luis Reyes por un puntapié sobre el propio Brizuela.
El Rebaño tocó a la puerta enemiga al menos un par de veces. Primero con un obús de Eduardo Torres que Vargas alejó recostando sobre su izquierda.
Más adelante, fue el travesaño el que salvó a los visitantes tras un tiro libre cobrado por Alexis Vega y que encontró una pierna atlista en su viaje.
Y en el ocaso del primer acto, las cosas se emparejaron en cuestión numérica con otra controversial tarjeta roja, esta vez sobre Miguel Ponce.por un pisotón a destiempo sobre Anderson Santamaría.
La segunda parte vino con más emociones futbolísticas y el invitado de honor al 63′, luego de un centro de Julián Quiñones desde el costado izquierdo que no encontró rematador y que se ‘comió’ Miguel Jiménez.
Minutos después, el colombiano se plantó frente al ‘Wuacho’ y el cancerbero del Guadalajara evitó el segundo tanto en su contra con un gran manotazo.
Y la respuesta de las Chivas fue incesante del 70′ al 80′, pero con un factor llamado Camilo Vargas, quien salvó a los suyos con grandes reflejos, primero con una volea quemante de Carlos Cisneros y después tras un impacto violento de Roberto ‘Piojo’ Alvarado.
No obstante, los de Ricardo Cadena rompieron el candado de la Academia tras un pase de Fernando Beltrán y una definición por abajo de Carlos Cisneros con el pie izquierdo.
El cuadro doméstico se creció y tuvo el triunfo de último suspiro con un mano a mano de Santiago Ormeño ante Camilo que el ’14’ mandó apenas encima del travesaño.
El Clásico tapatío cerró con intensidad y suspiros en las tribunas, así como con división de unidades para ambas ‘tribus’.
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