El piloto mexicano Sergio Pérez terminó quinto en el Gran Premio de Hungría, en una carrera que fue ganada por su coequipero el campeón del mundo Max Verstappen, mientras que Lewis Hamilton fue segundo y George Russell, tercero.
Desde la arrancada, Checo se vio agresivo para tratar de contrarrestar el hecho de partir desde la posición 11 por ser eliminado el sábado de la Q2, y de inmediato ganó dos lugares.
Tras una clasificación de pesadilla, Pérez prometió que daría batalla este domingo: “No fue el día que esperábamos! Todo nos salió mal, mañana (hoy domingo) vamos a darlo todo para minimizar el daño”, escribió en su cuenta de Twitter.
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En la vuelta siete, el tapatío continuó la remontada y superó con una gran maniobra al español Fernando Alonso y se colocó octavo. De inmediato ahora su objetivo era Esteban Ocon, al que no tardó en dejar atrás (vuelta nueve) y en una etapa muy temprana del Gran Premio, Pérez ya estaba en la pelea.
En la vuelta 13 Sergio Pérez escaló al quinto sitio gracias a un rebase sobre Lando Norris y a partir de ese momento empezó la ‘rueda de la fortuna’ con el cambio de posiciones por la entrada a pits de los pilotos.
La pelea por los tres lugares del podio estuvo al rojo vivo entre Max Verspappen, los dos de Ferrari (Charles Leclerc y Carlos Sainz), además de los Mercedes de George Russell y el siete veces campeón del mundo, Lewis Hamilton.
Finalmente el actual campeón del mundo se impuso gracias a una gran carrera porque arrancó décimo, los Mercedes hicieron el 2-3 (Hamilton-Russell), y el mexicano Checo Pérez sumó puntos importantes al terminar quinto.
