El Tour de Francia regala un gesto de deportivismo puro: El campeón defensor sufrió una caída y su rival se detuvo para esperarlo

Pogacar y Vingegaard se felicitan al final de la etapa. (Foto: Reuters).
• El Tour de Francia regaló una imagen ejemplar luego de que Pogacar cayó en una curva, y su rival Vingegaard lo esperó para seguir compitiendo.

El Tour de Francia regaló un gesto de deportivismo que ya le da la vuelta al mundo. El campeón defensor, Tadej Pogacar, de Eslovenia, cayó en una curva, pero se levantó casi de inmediato y comenzó a pedalear nuevamente, con la sorpresa de que Jonas Vingegaard, con quien disputa la edición actual, se detuvo metros más adelante para esperarlo.

El momento ocurrió en la bajada del Col de Spandelles, donde primero estuvo a punto de irse al suelo Vingegaard mientras los dos ciclistas tomaban la curva, pero el que acabó cayendo fue Pogacar.

Parecía una oportunidad inmejorable para que el danés escapara, pero al percatarse de lo sucedido disminuyó la velocidad varios metros adelante hasta que vio aparecer a su contrincante.

Pogacar reconoció el gesto del líder del Tour estrechándole la mano en plena carrera, y posteriormente lo felicitó tras su victoria en Hautacam, un triunfo que pone al danés a un paso de la victoria final.

Pogacar felicitó al equipo Jumbo de Vingegaard: “Ha hecho un trabajo perfecto en este Tour, me quito el sombrero”.

“Ha ganado el mejor, Jonas fue más fuerte que yo en la última subida”, dijo.

“Por desgracia me caí y eso me costó mucha energía. Traté de seguir a los Jumbo hasta el final, pero han sido demasiado fuertes para mí”, señaló.

Pogacar agradeció que el maillot amarillo le esperara tras la caída bajando el puerto de Spandelles: “Le respeto mucho y creo que él a mí también. Cuando me ha esperado estaba en una posición donde se lo podía permitir, porque tenía compañeros en todos los puntos de la carrera.

“Quería atacar en la bajada, pero fui demasiado lejos y me caí”, aseguró. 

Comparte esta nota