El sacerdote José Guadalupe Rivas, encargado de la Casa del Migrante de Nuestra Señora de Guadalupe, fue asesinado junto a otra persona en el municipio de Tecate, Baja California.
El miércoles, Marina del Pilar Ávila, gobernadora de Baja California, confirmó en una conferencia de prensa que el sacerdote fue asesinado.
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“Sumamente lamentable, ayer me enteré, nos informaron, sumamente lamentable la situación que se vivió con el asesinato de un pastor, entiendo”, dijo la gobernadora.
Aseguró que la Fiscalía General del Estado de Baja California ya abrió una carpeta de investigación por los asesinatos y prometió que no habrá impunidad.
La Arquidiócesis de Tijuana dio el miércoles en su cuenta de Facebook su pésame por la muerte de José Guadalupe Rivas, de 58 años de edad, quien estuvo a su servicio por 25 años.
El sacerdote y otra persona fueron hallados muertos con signos de violencia el lunes en el fraccionamiento Las Misiones, municipio de Tecate, según reportaron medios locales.
Con el asesinato de José Guadalupe Rivas suman cinco sacerdotes asesinados por causas violentas de 2018 a 2022, de acuerdo con el Centro Católico Multimedial.
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En el primer trimestre del año, se han abierto 645 carpetas de investigación por el delito de homicidio en Baja California, muestran datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
Según el índice de Paz México 2022, Baja California se ubica como uno de los estados con las tasas más altas de homicidios y como el estado menos pacífico del país.
“Desde 2015, la ciudad de Tijuana ha registrado más de 11 mil casos de homicidio, lo que representa casi las tres cuartas partes de todos los casos de homicidio en Baja California en los últimos siete años”, dice el informe.
