AP.- El esfuerzo del expresidente Donald Trump para moldear las candidaturas de los republicanos para 2022 se pondrá a prueba este fin de semana en Michigan, donde miles de activistas del partido apoyarán a los candidatos, incluso en una polémica contienda por el cargo de fiscal general.
Trump, que sigue haciendo afirmaciones falsas sobre su derrota de 2020 en el estado indeciso, tiene claras sus intenciones. Quiere expulsar a los funcionarios demócratas que aseguraron que los resultados se mantuvieran intactos y reemplazarlos con los aliados Matthew DePerno y Kristina Karamo, recién llegados a la política, que se postulan para fiscal general y secretario de estado, respectivamente.
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“Esta elección no se trata solo de 2022. Se trata de garantizar que el estado de Michigan no pueda ser robado a los republicanos en 2024 o nunca más”, dijo Trump el miércoles en una llamada con los partidarios de DePerno.
Sin embargo, su lista preferida para los principales puestos policiales y electorales del estado está generando críticas dentro de un ala del Partido Republicano que considera a los candidatos como no elegibles en noviembre y está frustrado porque los líderes del partido estatal los han respaldado abiertamente en lugar de ser neutrales.
“Vamos a averiguar si vamos a ser rehenes de los candidatos de segundo nivel que no pueden ganar las elecciones generales en busca de hacer una derrota ante el querido líder, o si nos vamos a centrar en ganar las elecciones y asegurándose de que los conservadores controlen el gobierno estatal y hagan las políticas bajo las cuales todos tenemos que vivir”, dijo Jason Roe, ex director ejecutivo del Partido Republicano de Michigan.
DePerno ayudó a un votante a demandar después de que un error humano llevó al condado de Antrim a mostrar erróneamente una victoria local de Joe Biden sobre Trump. Se corrigió rápidamente, pero se usó para difundir información errónea sobre los equipos de votación.
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El principal rival de DePerno por la nominación es Tom Leonard, exlíder legislativo y candidato del partido en 2018. El representante estatal Ryan Berman también se postula.
Leonard perdió ante Dana Nessel por menos de 3 puntos porcentuales en un gran año para los demócratas, pero le fue mejor que a los republicanos que perdieron las contiendas para gobernador y secretario de estado por márgenes más amplios.
Trump, quien nominó a Leonard para ser el fiscal federal para el oeste de Michigan, ahora lo etiqueta como un “RINO” establecido, o republicano solo de nombre, cabildero. Lo ha acusado de no hacer lo suficiente para luchar contra el resultado de las elecciones de 2020.
Leonard dijo que ha construido una coalición más grande que DePerno, lo indignó, se sometió a una investigación de antecedentes más extensa y puede unificar en lugar de dividir al partido. Dijo que no le sorprende que Trump esté “todo adentro” por su candidato.
“Lo que esto ha hecho es que me obligó a mí ya mi equipo a trabajar más duro y nos obligó a perfeccionar nuestras habilidades”, dijo Leonard en una entrevista. “Creo que voy a ser un candidato mucho más fuerte por eso cuando nos acerquemos a noviembre”.
DePerno dijo que a sus oponentes no les importan las elecciones de 2020 y que él puede establecer el mayor contraste con Nessel en los mandatos de Covid-19 y otros temas. Contar con el apoyo de Trump, dijo el miércoles en el evento del ayuntamiento virtual de Trump, es un “gran y gran logro” que resultará en una “victoria rotunda” y la unidad del partido.
